Aunque la fachada del hogar de Kevin era muy atractiva, por cuestiones técnicas tuvieron que rodar algunas escenas en una escuela abandonada. Dentro de sus instalaciones realizaron el montaje de las habitaciones internas.
La casa del árbol del patio trasero solo fue construida para su uso en la película. Finalizado el rodaje, procedieron a desmantelarla. Las escenas de la cocina, la escalera principal y el sótano fueron filmadas en el interior de la vivienda, mientras que el comedor y las demás habitaciones fueron construidos en el gimnasio y la piscina vacía de la escuela.
La emblemática casa de Kevin es uno de los sitios más famosos en la ficción. Sin embargo, la vivienda realmente existe y, aún tras treinta años del estreno de la película, sigue en pie.
Para lograr ciertas perspectivas y efectos visuales, utilizaron una “cámara extra”. Una de las escenas en las cuales se recurrió a esta fue la de la plancha cayendo por un ducto de aire, en donde ataron la cámara con una soga y la colocaron por la ventilación, logrando filmar a la plancha a punto de estrellarse contra la cabeza del ladrón.
Las escenas de resbalones y golpes contra la pared o el suelo fueron reales. Tanto el director como el productor revelaron que dichas partes solo les causaba preocupación hacia los actores que debían interpretarlas.

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