Practicar actividades artísticas: actividades como dibujar, pintar y esculpir pueden ayudar a mejorar las habilidades visuales al desarrollar la percepción de formas, colores, sombras y texturas.
Estimular la imaginación: ejercicios que estimulen la imaginación y la creatividad, como imaginar objetos en formas de nubes o visualizar escenas mentales, pueden mejorar la capacidad para visualizar y procesar información visual.
Realizar ejercicios físicos y deportes: los deportes y los ejercicios físicos pueden ayudar a mejorar la coordinación ojo-mano, la percepción espacial y la capacidad para procesar información visual en movimiento.

En general, cualquier actividad que involucre el procesamiento y la percepción visual puede ayudar a mejorar las habilidades visuales. Es importante recordar que, al igual que con las habilidades cognitivas, las habilidades visuales también necesitan ser ejercitadas y desafiadas para mantenerse en forma y funcionar adecuadamente.

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