El televisor es el dispositivo final en el sistema de televisión, que comienza con la captación de imágenes y sonidos en la fuente, y su emisión y difusión a través de diferentes medios. El televisor se ha convertido en un electrodoméstico cotidiano y común en los hogares de todo el mundo. El primer televisor comercial fue creado el 26 de enero de 1926 por el escocés John Logie Baird.

Los primeros televisores comerciales eran de tipo mecánico y se basaban en un disco giratorio, el disco de Nipkow, que contenía una serie de agujeros dispuestos en espiral y permitía la exploración “línea por línea” de una imagen fuertemente iluminada. La resolución de los primeros sistemas mecánicos era de 30 líneas a 12 cuadros, pero más tarde se mejoró para alcanzar cientos de líneas de resolución e incluso la capacidad de mostrar color.

A finales de la primera década del siglo XXI, con el desarrollo de Internet, aparecieron los televisores conectables y se comenzó a hablar de la “televisión híbrida”, que combina la recepción convencional con el acceso a la red para ver contenido audiovisual o de cualquier otro tipo, abriendo nuevas áreas de servicio.

También se han desarrollado sistemas de representación en 3D y mejoras en el sonido. Los televisores ahora pueden mostrar varias imágenes o contenidos diferentes a la vez en sus pantallas y grabar contenido sin la necesidad de elementos externos.

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