10 Mentiras que los cineastas nos han hecho creer y creímos por completo
Cuando vemos una peli, cualquiera que sea el género, pensamos que es normal que los protagonistas viajen a través del tiempo o a la velocidad de la luz. Constantemente creemos estas y otras mentiras sin chistar, porque las historias nos atrapan de tal forma que no prestamos atención a esos detalles. Queremos mostrarte 10 cuentotes que son ejemplo de esto.
¿Qué otra mentira cinematográfica has creído hasta el momento?
1. Los cascos vikingos no tenían cuernos en la vida real
En muchas representaciones de este famoso pueblo germano se ve a las personas con cascos con cuernos, cuando eso está muy alejado de la realidad. Evidencia encontrada en Gjermundbu, al norte de Oslo, Noruega, sugiere que los vikingos sí usaban yelmos, pero sin los famosos cuernos.
2. Pocahontas y John Smith no se enamoraron
Según la historia real, Pocahontas y John Smith no se enamoraron, como pudimos ver en la película de Disney. Es más, ella en realidad se llamaba Matoaka, y fue rebautizada como lady Rebecca Rolfe al casarse con John Rolfe en Inglaterra en 1614.
3. William Wallace no se pintaba la cara
Uno de los aspectos más reconocidos del retrato del héroe escocés William Wallace en la película Corazón valiente es que llevaba franjas azules pintadas en el rostro. Según las usanzas de la época en la que está ambientada la cinta, esto no es verosímil, porque estas marcas eran usadas por los pictos, un pueblo celta que era llamado así por los romanos debido a las pintas y tatuajes presentes en los cuerpos de sus miembros.
4. Viajes a la velocidad de la luz
En muchas películas de ciencia ficción como Star Wars y Star Trek se propone el viaje a la velocidad de la luz e incluso mucho más rápido que eso. Según las leyes de la física, concretamente la teoría de la relatividad de Einstein, hay ciertas condiciones que posibilitan viajar casi a la velocidad de la luz, pero nunca igualar o superar dicha aceleración.
5. Extraterrestres
Los extraterrestres son un elemento muy común en las películas de aventuras espaciales y ciencia ficción. Sin embargo, la gran mayoría de las veces tienen forma humanoide o parecida a animales que vivieron o viven en nuestro planeta. El gran problema de imaginar la existencia de seres en otros mundos reside en que la única referencia que se tiene sobre la vida es la propia y la que vemos alrededor nuestro.
6. Las antorchas en Hollywood
Siempre que personajes como Indiana Jones descubren una tumba antigua, toman una vieja antorcha del lugar y la encienden. Esto en realidad no debe ser posible, ya que, al igual que otros materiales, los aceites tienen un vencimiento. Además, la madera también se daña con el tiempo, y habría que considerar el estado de humedad del recinto.
7. Viajes en el tiempo
Según lo que explica el periodista científico Quentin Cooper, los viajes a través del tiempo son poco probables. Ir al pasado supondría el riesgo de alterar la continuidad del presente, por lo que su posibilidad queda descartada de acuerdo con las leyes de la física.
8. Bebés recién nacidos
Siempre que hay un bebé recién nacido en una película, la mayoría de las veces se lo muestra más grande y limpio que en la realidad. Esto responde a ciertas legislaciones estadounidenses que regulan el trabajo de infantes en las cintas. Además de eso, uno de los ordenamientos que existen es que el bebé no puede tener menos de 15 semanas de nacido para aparecer en la pantalla chica.
9. La hipotermia de Jack y Rose en Titanic
Siempre ha existido el debate sobre el trágico final de Jack, pero una cosa que habría que tomar en consideración es que tanto él como Rose podrían haber sobrevivido sobre la tabla hasta que llegara la ayuda. En un experimento, los cazadores de mitos comprobaron que ambos personajes pudieron haberse salvado de las congeladas aguas tras el hundimiento del Titanic.
10. Sobrevivir a una caída de agua muy alta
Muchas veces, en las películas de aventuras o incluso en las animadas vemos a algún personaje lanzándose desde una cascada muy alta hacia un río o un lago. Una caída de unas cataratas como las del Niágara, las cuales cuentan con 51 metros de alto y son bastante caudalosas, puede ser particularmente letal. Por eso, expertos dieron algunos datos sobre qué hacer para sobrevivir apropiadamente al caer en estas condiciones.