20 Niños que, por sus comentarios, merecen un premio a la creatividad

La infancia es una etapa de la vida en la que aprendemos de nosotros mismos y del mundo. Además, es un periodo formativo en el que aún estamos desarrollando habilidades sociales, por lo que la prudencia no es el fuerte de los más pequeños. A razón de ello y de su forma tan particular de ver el mundo, las observaciones infantiles pueden ser de lo más creativas y graciosas.

• Mi hijo de 3 años se lastima jugando y exclama “MIÉRCOLES”.
  Yo: Cariño, no debes decir esa palabra, no es bonito.
  Mi hijo: ¿Y puedo decir DOMINGO?
  Yo: Sí, puedes decir domingo.
  Mi hijo: Si puedo decir DOMINGO, ¿por qué no puedo decir MIÉRCOLES?
  Yo quedo desarmada ante esa lógica y me pongo de acuerdo con él.
  Después de unos días, mi hijo estaba en la sala con su padre y yo estaba en la cocina.
  Mi hijo: ¡MIÉRCOLES!
  Papá: Cariño, ya sabes que no puedes decir eso.
  Mi hijo: Mamá, ven y explícale a papá por qué YO sí puedo decir MIÉRCOLES. © Liz Simmonds / Facebook
• “Mamá, hice los deberes. Ahora tienes que encontrar otra razón para no dejarme ver la tele”. Mi hijo, la crianza a la inversa. © MadHatterMommy / Twitter
• Mi hijo: ¿Mamá como se llama eso?
  Yo: Microondas.
  Mi hijo: ¿Y para qué sirve?
  Yo: Podemos calentar cosas ahí.
  Mi hijo: Mamá, ¿me das leche?
  Yo: Está fría.
  Mi hijo: ¿La podemos calentar en el “tucroondas” ? © Cris EQ / Facebook

• Un día mi hijo de 5 años me preguntó cuál sería el desayuno para ir a la escuela. Yo le respondí que en el camino le compraría algo porque tenía pereza de hacer desayuno ese día y él me respondió “¡Si yo me pude levantar para ir a la escuela, tú también te puedes levantar para hacer el desayuno!” © Gina Barrera Gómez / Facebook
• Mi hermana le dijo a mi sobrino de 5 años que en la barriga tenía una hermanita para él. Él le preguntó si se la había tragado, y luego de explicarle un poco la situación, preguntó: “¿Viene desarmada como los juguetes en los huevos Kínder?”. © Luzma Garcia Alvarez / Facebook
• Estaban mis dos hijos desayunando (uno de 6 y otro de 3). El menor me preguntó: “Mamá, ¿me das más hotcakes?” Le puse un poco más de la mitad de uno, y el mayor dijo “Yo también quiero más”. Le puse en su plato lo que restaba del otro, y al ver que le tocó el pedazo más pequeño se quejó: “No es justo mamá, a Fer le diste el más grande”. A lo que contestó el hermano menor viendo los dos platos y comiendo tranquilamente: “Créeme Óscar, la vida no es justa”. © Kamar Loo / Facebook

• Nos mudamos a una nueva casa. Mi esposo y yo decidimos que mi hijastra de 9 años tendría una habitación con baño privado porque es la única niña, mientras que nuestros otros tres hijos son varones. Cuando su hermano de 8 años trató de protestar, mi hijastra le dijo: “Es para que cuando tenga la menstruación, disponga de mi propio baño. No querrás que mis toallas higiénicas estén por todas partes, ¿verdad?”. © Ok_Wait880 / Reddit
• Cuando llegó su tío, mi nieta de 4 años gritó: “¡Ya está aquí el tío que tapa el baño!”. © Martin Ramon Lopez Gonzalez / Facebook
• Mi hijo de 4 años se estaba portando muy mal y le dije que ya me había hecho perder la paciencia. Se metió al closet y le pregunté qué hacía, me contestó que me estaba ayudando a buscarla. Un minuto después salió contentísimo porque ya la había encontrado. © Elda Carolina Munguia / Facebook

• Fuimos a visitar a mi abuela, cuando ya nos íbamos le pedí a mi hija de 5 aňos que le diera un beso. Ella no quería dárselo, me dijo que porque estaba derretida (las arrugas). Me dio pena con la abuelita que estaba esperando su beso. © Karina Kasse / Facebook
• A sus 5 años, mi hija me preguntó: “Mamá, ¿ese señor está embarazado?”. Su mujer, que estaba hablando conmigo, se partió de la risa. © Marta Espinosa Guerrero / Facebook
• Un día, llevé a mi hija de 8 años a mi oficina. En cuanto cruzamos el umbral, rompió a llorar. Mientras el personal, preocupado, la rodeaba, le pregunté a mi hija qué había pasado. Y me dijo, sollozando: “Papá, ¿dónde están todos los payasos con los que dijiste que trabajabas?”. © Dadsaysjokes / Twitter

• Mis hijos eran menores, y cuando yo discutía con la mayor, el pequeño de 6 años le decía: “Dile a todo que sí y ya se calla”. Era su técnica para no discutir conmigo, aunque hacía lo que quería, lástima que de grande se le olvidó la recomendación. © Emma Kelly / Facebook
• En una ocasión, íbamos en una combi de transporte público, mi hijo de 4 años y yo. Él se sentó al lado de la puerta abierta y le dije que mejor se cambiara de lugar conmigo. Le dije que era porque ahí se podía caer y lo podía atropellar un coche. Me respondió: “Y si tú te mueres, ¿a mí quién me va a dar de comer?”. © Rosy S. Paz / Facebook
• Mi hija me saca los protectores diarios femeninos y se los pone de pañales a sus bebés muñecos. © Maria Eugenia Muñoz Alfaro / Facebook

¿Qué es lo más gracioso que recuerdas haber dicho en tu niñez?