20 Nombres y apellidos originales que nos hacen decir “¿es en serio?”
Para nuestra mala suerte: nosotros no elegimos el nombre y apellido que llevaremos toda la vida. Esa enorme responsabilidad la tienen nuestros padres y, la verdad, a veces su elección parece una mala broma. ¿Por qué son así?
En Ahora lo vi todo reunimos apellidos y nombres poco comunes que quedaron grabados en la memoria de quienes los escucharon y hoy los comparten.
- ¡Labrador! Y un día que fui a su casa se me olvidó el apellido, pero me acordé de que era raza de perro y pedía por la familia Pastor. © Laura Martinez / Facebook
- Una vez, en una clase que tomé, había una persona de apellidos Cabello Blanco y todos empezaron a apodarle “la cana”. © Nydia Granado / Facebook
- Mi hermana tenía una compañera de colegio que se llama Rosita León Conejo y le decían Flora y Fauna. © Chúz Acuña Cartín / Facebook
- En frente de mi casa vivió una familia de apellido Rosado y le pusieron a una de las niñas Blanca Celeste Rosado. © Sylvia Bello Nieves / Facebook
- Mi mamá es Hoyo y, cuando un día una secretaria le pidió su apellido y no lo ubicaba, mi mamá le decía: “Mi apellido es Hoyo... de agujero”, haciendo referencia a que era como un agujero. Y terminaron por escribir “Sra. Hoyo de Agujero”. © Gray Mila / Facebook
- Una conocida es Huerta de apellido y el apellido de su esposo es Lechuga, entonces, ella se llama Huerta de Lechuga. © Vanesa Florio Cervantes / Facebook
- Esperando que nos llamaran por lista para hacer el examen teórico de conducir. Todo el mundo nervioso y en silencio para escuchar bien los nombres y, sobre todo, los apellidos, cuando, de repente, el silencio se convirtió en risas porque llamaron a Conejo Salido. ¡¡Por favor!! La pobre chica no sabía dónde meterse. © Mari Carmen Martínez / Facebook
- Tengo unos sobrinos cuyos apellidos son Trampa Segura. Es una combinación de dos apellidos. © Aracely Salazar / Facebook
- Una maestra: Dolores de Barriga. © Ana Maria del Rio / Facebook
- En el barrio La Concordia, era muy respetada una vecina de origen francés que se dedicada a los arreglos de ropa para dama. Su nombre: Pura Mier. Todos le decían Doña Purita. Su esposo se llamaba Jorge Gallo. © Carlos Humberto Rodriguez Guerrero / Facebook
- Porley, especialmente cuando la profe de Educación Cívica decía: “Por ley...” y mi compañera, Susana, decía: “¿Qué, profe? Yo no hice nada”. © Alejandra Ferro / Facebook
- Quijada de León. La señora era de apellido Quijada, y el esposo León. © Isabel Chavarría / Facebook
- Muy. ¡Sí! La muchacha se apellidaba Muy. Y no conforme con eso, su segundo apellido TAMBIÉN ERA MUY. Era la chica Muy Muy. © J Nätty Valenzuela / Facebook
- Mi mamá me contó que su bisabuela, o sea, mi tatarabuela, se llamaba Dolores Noche, y un día le presentaron a una mujer que se llamaba Dolores Días. Cuando mi tatarabuela le respondió: “Encantada, Dolores Noche”, la mujer se puso brava y se fue porque creyó que era una burla que le había hecho mi abuelita. © Karina Suarez / Facebook
- En la escuela tenía un profesor con apellido “del Mercado” y cuando preguntábamos por él, decíamos: “¿Ya regreso el profe del mercado?”. © Alejandro Javier Carreon Gonzalez / Facebook
- Una vez, me tocó atender a una señora. Le pregunté el nombre y se llamaba Reina, pero se ponía el apellido del esposo, que era Cerdas. No sé cómo le gustaba identificarse como Reina de Cerdas, sobre gustos no hay nada escrito. © Rocío Santiesteban Valverde / Facebook
- Era el nombre completo, ella se llamaba Ana, de apellido Dolores, y el esposo era Quijada (Ana Dolores de Quijada), y ella decía sonriendo: “Pero ya tomé pastillas, no te preocupes”. O decía: “Más que dolores de quijada, me da dolores pero de cabeza”. © Mirna Mazariegos de Bonilla / Facebook
¿Cuál es el nombre o apellido más raro que has escuchado?
Imagen de portada Carlos Humberto Rodriguez Guerrero / Facebook
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