10 Consejos que podrían hacernos más amigables al conocer a un perro
Si te gustan los perros, es probable que te derritas cada vez que encuentras uno en el parque, en la calle o en casa de tus amistades. Ellos son criaturas nobles y alegres, que por lo regular están dispuestas a hacer amigos. Sin embargo, no debemos darlo por hecho, pues así como nosotros, pueden estar teniendo un mal día o no ser muy sociables. Así, no saber cómo interactuar por primera vez puede llevar a accidentes y malas experiencias.
En Ahora lo vi todo hicimos algo de investigación para que los apasionados de los peludos puedan tener acercamientos seguros y cómodos para ambos.
1. No te apresures
Algunas veces no podemos controlar el impulso de ir hacia un perro y mimarlo. Sophia Yin, especialista en conducta animal, afirma que hacerlo de manera abrupta puede resultar intimidante para ellos. Lo mejor es acercarnos lentamente y de forma relajada. Así, el perro tendrá oportunidad de sentirse seguro y sabrá que no vas a hacerle daño a él o a su amo.
2. Pregunta a su dueño
Otro error común que cometemos es ir directamente hacia las mascotas, sin preguntarles a sus dueños si podemos acercarnos. Esto, además de ser un acto de cortesía, puede orientarnos en caso de que el perro sea agresivo o debamos aproximarnos de alguna manera en particular. La doctora Yin sugiere que nos tomemos el tiempo de pedir el permiso del dueño, así el can también se sentirá confiado.
3. Evita el contacto visual directo
Incluso para los humanos, mirar a los ojos a un desconocido puede ser un poco extraño y hacernos sentir incómodos. Lo mismo puede suceder con los perros. La doctora también recomienda que, una vez que tengamos el permiso de su amo, no los miremos directamente, para hacerlos sentir cómodos en nuestra presencia, y que nuestro primer acercamiento sea por el costado, no de manera frontal.
4. Deja que su olfato lo guíe
A diferencia de los humanos, los perros tienen un olfato más desarrollado y esa es su forma de aproximarse al mundo. Otro consejo de la doctora Yin es que dejemos que sean ellos los que vengan a nosotros, permitiéndoles olfatear nuestras piernas y manos, para que puedan elegir ser acariciados por un extraño.
5. No acaricies su cabeza ni levantes tu mano por encima de él
Es común que al acariciar un perro, pongamos nuestra mano sobre su cabeza, y a algunos perros no parece molestarles. Sin embargo, el veterinario Uri Burstyn afirma que este gesto puede parecer agresivo para ellos y provocar una reacción negativa. Sugiere en cambio que después de habernos acercado, bajemos un poco nuestra mano para que nos conozcan.
6. Protege tus manos y déjalo conocerte
Ahora que has bajado tu mano para que tu nuevo amigo pueda olfatearte un poco, Burstyn recomienda, para tener mayor seguridad tanto en niños como en adultos, cerrarla suavemente, mostrándole el dorso de la mano. De esta forma, nuestros dedos quedan protegidos en caso de que el perro resulte ser agresivo.
7. Respeta su espacio
El espacio personal también es importante para los perros, y si vamos a agacharnos para acariciar a un perro que ya nos ha dado su confianza, es aconsejable respetarlo. Por esta razón, la doctora Yin recomienda mantener cierta distancia para darle libertad de movimiento mientras se están conociendo.
8. Acaricia su barbilla
Una vez que hemos conquistado la confianza del animal, podemos acariciarlo. Pero en lugar del lomo o la cabeza, el doctor Burstyn sugiere que comencemos por la barbilla, debajo del hocico. Este es un lugar seguro para nosotros y amable para ellos, de esta forma no estaremos haciendo algo que les pueda resultar agresivo.
9. Acaricia en lugar de abrazar
Las expresiones humanas de amistad pueden no ser recibidas por los perros de la misma manera. Esta conducta puede ocasionar altos niveles de estrés en ellos, y al tratarse de un perro desconocido, puede ser peligroso también para los humanos, sobre todo si son niños. La doctora Yin recomienda optar por las caricias en lugar de los abrazos.
10. Evita acariciarlo si está nervioso
Observar el comportamiento del perro puede ayudarte a saber si él quiere ser acariciado o no. Cabe la posibilidad de que no esté interesado en conocerte o que se encuentre nervioso. En el último caso, lo mejor es no obligarlo a que se acerque, pues no se sentirá del todo cómodo. Una de las recomendaciones de la doctora Yin es que nos aproximemos solo si vemos que está relajado y feliz; si no lo está, solo podemos mirarlo.
¿Cuál es la forma en la que tú te acercas a una mascota desconocida? ¿Qué tan sociable es tu mascota? ¡Nos encantaría conocerla!