15 Trucos psicológicos que podrían hacer una gran diferencia en el bolsillo al momento de hacer compras
Comprar es una actividad tan estimulante que muchos la consideran terapeútica. Además de la gratificaicón que ello nos causa, los comerciantes también diseñan sus tiendas y hacen estrategias para que sea incluso más placentero, y que con ello, gastemos más dinero en sus productos. Sin embargo, con la información correcta podemos evitarlo, sin que sea necesariamente difícil.
En Ahora lo vi todo somos amantes de la psicología, por lo que investigamos cómo darle la vuelta a las pequeñas trampas que hay en nuestro cerebro y afectan nuestra cartera.
1. Ponte tacones altos
Según un estudio, tener que concentrarse en mantener el equilibrio mientras usas tacones altos podría tener un impacto en el dinero que gastas. De esta manera, los consumidores podrán evaluar sus opciones con más cuidado y elegir productos con precios de rango medio en lugar de aquellos que son muy caros. Curiosamente, ir de compras después del yoga o después de subir a una escalera mecánica puede tener el mismo efecto.
2. Ten billetes nuevos en tu billetera
Otro estudio dice que la apariencia física del dinero también influye en nuestros gastos. Es más probable que las personas se desprenden más rápido de esos billetes que parecen viejos, sucios y gastados. Trata de guardar los nuevos billetes en tu billetera y el resto de ellos deposítalos en tu cuenta bancaria.
3. Procrastinar puede ser bueno
Antes de hacer clic en el botón “completar el pedido” mientras compras en línea, puedes intentar cerrar el sitio web y dejarlo durante unas horas o durante la noche. Puede suceder que incluso te olvides de los artículos que elegiste, lo que significa que realmente no los necesitas. Puedes hacer exactamente lo mismo en una tienda física volviendo a colocar el artículo y alejándote un rato de esa tienda.
4. Evita las interacciones prolongadas con el personal de ventas
Las interacciones positivas con los clientes son una de las reglas que muchos minoristas siguen cuidadosamente. Mientras más los vendedores interactúen con sus clientes, más tiempo los harán permanecer en su tienda y es más probable que los clientes compren más de lo que pretendían. Sabiendo esto, ahora puedes intentar reducir estas interacciones para que sean lo más breves posible, o simplemente no interactuar en absoluto.
5. Trata de dejar tu tarjeta bancaria en casa más seguido
Un estudio más revela que es más probable que los consumidores gasten más dinero si pagan con sus tarjetas de débito que si pagan en efectivo. Cuando pagamos en efectivo, vemos la cantidad de dinero que gastamos y, por lo tanto, puede ser doloroso. Sin embargo, pagar con tarjeta dificulta el seguimiento de tus gastos.
6. Al comprar, evita registrarte como usuario en una cuenta
Cuando compres en línea, evita registrarte en una cuenta para que no se guarden los datos de tu cuenta bancaria. La información guardada significa que la compra se puede realizar con varios clics y, por tanto, desencadenar una compra impulsiva. Si continúas con tu compra como invitado, y no usuario, deberás ingresar tu número de tarjeta y otra información, lo que significa que existe la posibilidad de que todo el proceso se vuelva tedioso y no quieras ir a buscar tu tarjeta y, finalmente, desistas de realizar la compra.
7. Consulta las reseñas de artículos caros
Comprar cosas caras por impulso y luego lamentarlo puede ser muy doloroso. Para evitar esto, intenta verificar en línea y ver lo que otros dicen sobre los productos que tienes la intención de comprar. A veces, es posible que descubras que la mayoría de los clientes terminaron descontentos con él, por lo que probablemente tampoco gastarías tu dinero en él.
8. Come un caramelo de menta al entrar en una tienda
Los vendedores utilizan una estrategia especial llamada “marketing de esencias” para hacer que la experiencia de compra sea más agradable para sus clientes. Usan aromas como bergamota, vainilla, té blanco o bambú para “estimular” a los clientes a gastar más. Los caramelos con sabor a menta o el chicle pueden abrumar los aromas que te rodean y ayudarte a no gastar más de lo que pretendías.
9. Escucha tu propia música
Otro truco para hacernos gastar más es utilizar sonidos y canciones agradables en las tiendas. Este tema se ha estudiado durante mucho tiempo y se ha demostrado que el ritmo y el género de la música influyen en la forma en que tomamos decisiones de compra. Para no ser engañado, puedes ponerte tapones para los oídos mientras compras o escuchar música que sabes que no influirá demasiado en tu estado de ánimo.
10. Evita tocar demasiado los productos
Los investigadores descubrieron que si a los clientes se les permite ver y tocar diferentes mercancías en la tienda, es más probable que las terminen comprando. Resulta que el tacto realmente influye en nuestras decisiones de compra y los vendedores lo convierten en una ventaja. Cuando compres, trata de tocar solo aquellos artículos que realmente deseas comprar.
11. No uses canastas o carritos al comprar alimentos
Algunas tiendas incluso alteran el tamaño de sus carritos de compras. Por ejemplo, se descubrió que agrandar el tamaño de un carrito de compras, puede resultar en que los consumidores gasten más dinero. La mejor manera de ahorrar dinero es usar una canasta o, mejor aún, tu propia bolsa de compras con una lista preparada de los productos que necesitas comprar.
12. Evita hacer compras en horas pico
Cuando los compradores están en una tienda abarrotada, se sienten fuera de control y esto puede hacer que gasten más dinero allí. Además, muchas personas terminan gastando de más cuando van de compras con sus amigos porque todo el proceso se vuelve más entretenido. Por lo tanto, intenta comprar lo que necesitas durante el tiempo en que los centros comerciales estén casi vacíos, y preferiblemente trata de hacerlo solo.
13. No aceptes las muestras gratuitas
Las muestras gratuitas de comida en diferentes tiendas son muy populares por una sencilla razón: pueden desencadenar nuestro sentimiento de reciprocidad. Si nos dan algo sabroso, podríamos sentir “estar en deuda” y, de algún modo, vamos a terminar pagando por el “obsequio” que nos dieron. Además, la comida gratis también dispara nuestro apetito y nos hace comprar más.
14. Comprueba siempre los envases nuevos
Las empresas rediseñan constantemente los envases de sus productos, pero esto puede ocultar un pequeño truco: el volumen del producto. Siempre verifica el volumen en el empaque actualizado para ver si se redujo y asegúrate de no estar obligado a pagar de más.
15. Revisa tu guardarropa antes de ir de compras
A veces, cuando compramos ropa, podemos terminar comprando artículos similares a los que ya tenemos. Antes de ir a la tienda, revisa tu armario para verificar y ver qué ropa ya tienes. De esta manera, mantendrás un registro de todos tus artículos y evitarás comprar otros similares.
¿En qué circunstancias crees que somos más susceptibles a gastar de más?