5 Trucos secretos en los menús de restaurantes para que gastemos más dinero (y cómo escapar de ellos)
Cada ámbito tiene sus propias reglas y el mundo restaurantero no es la excepción. Algunos chefs y dueños de estos lugares poseen algunos secretos que ponen en práctica para influir en nuestras decisiones. Por ejemplo, si tu intención solo es tomar un aperitivo, es posible que termines con el estómago más lleno de lo que planeabas. ¿Y esto por qué? Enseguida te explicamos.
1. El peso del menú influye en nuestra percepción
Las investigaciones revelan que la impresión que tenemos de la comida comienza en el momento en que tomamos el menú en nuestras manos. Los menús más pesados dejan una mejor impresión, haciéndonos creer que el servicio del restaurante será del más alto nivel, mientras que las cartas ligeras hacen que la gente se pregunte si el lugar será demasiado informal y “económico”. Así que la próxima vez que tengas en tus manos un menú de cuero con buen papel, no te dejes engañar, no tiene nada que ver con la calidad de la comida o del servicio.
2. Algunos nombres de platillos pueden dar hambre
El nombre puede hacer que un determinado platillo sea hasta un 23 % más popular. Una investigación demostró que los nombres acogedores y emocionantes aumentaban el número de personas que elegían determinada comida. Otra forma en que los restaurantes utilizan los nombres para hacer que se escojan ciertos productos es poniéndoles etiquetas nostálgicas, como “hecho a mano” u “horneado como la abuela”, lo que provoca emociones positivas.
3. El tipo de letra influye en la forma en que percibimos los alimentos
Según el tipo de letra utilizado, el menú puede transmitir mensajes diferentes. Los visitantes que leen un menú en cursiva suelen percibir que el restaurante es de más categoría y con un servicio de primera, mientras que los caracteres sencillos y fáciles de leer pueden asociarse con lo “básico” y lo “económico”.
4. Los colores dentro del menú también “envían señales”
Los colores que se ven en un menú también tienen una gran influencia, ya que la gente responde emocionalmente a ellos. El rojo y el azul son los colores más populares que utilizan los restaurantes cuando quieren provocar y aumentar tu apetito. Lo que hacen es resaltar en color y con letras más grandes los elementos principales de su menú. Estos colores llaman tu atención. En las marisquerías, el azul suele ser el color elegido para los menús, ya que indica que la comida que se sirve viene directamente del mar.
5. Menos fotos harán que pidamos más comida
El viejo dicho de que la gente come con los ojos no siempre es cierto. Aunque lo visual es importante, un especialista en diseño de menús dice que demasiadas fotos pueden hacernos creer que el restaurante es de baja categoría. Nuestro gasto aumenta un 30 % cuando vemos una sola foto por página. A menudo, los restaurantes caros prefieren dejar la calidad de la comida a la imaginación del comensal.
¿Conoces algún otro truco de los restaurantes? Nos encantaría que nos contaras tu experiencia.