18 Historias que prueban que la amabilidad es el mejor regalo que podríamos hacerles a los demás

Se dice que la generosidad es lo que mantiene a las personas unidas. Y es que para ayudar a los demás, no necesariamente debes tener mucho dinero o tiempo libre. A veces, solo basta con pequeños actos que podrían cambiarle el día —o incluso la vida— a alguien más. Puede ser un simple saludo, devolver algo perdido o sostener la puerta para que otro entre primero.

En Ahora lo vi todo no quisimos pasar por alto estos actos de solidaridad. Esperamos que encuentres estas historias tan reconfortantes como nosotros y que te inspiren a ser más amable con quienes te rodean, ya sean conocidos o perfectos extraños.

“Alguien puso un calefactor en las calles de Katmandú, en Nepal, para que los perritos callejeros no tuvieran frío”

• Una vez me sentía muy triste por problemas relacionados con la escuela y la vida en general, así que me detuve en una tienda de camino a casa a comprar un poco de chocolate para sentirme mejor. El empleado de la caja seguramente se dio cuenta de cómo me sentía, porque me regaló la barra de chocolate que iba a comprar. Fue un acto de bondad realmente simple, pero por poco no me eché a llorar ahí mismo. Sin dudas, mejoró instantáneamente un mal día. © angry__donkeys / Reddit
• Una vez, cuando tenía 8 años, nadie me recogió de la escuela y me fui a casa caminando. Se vino una tormenta. A mi lado se detuvo un auto, de ahí salió una mujer y ofreció llevarme. Mis padres me enseñaron a no hablar con desconocidos, en especial subirme a un carro con ellos, así que yo la rechacé. Entonces, ella sacó un gran paraguas de colores y me lo dio. “No te mojes, pequeña”, me dijo y se fue. Abrí el colorido paraguas sobre mi cabeza y me fui sonriendo. Aún tengo ese paraguas, me ha servido 7 largos años. © LifeAndDe***69 / Reddit
  

“En Atlanta existe un puesto de comida gratis”

• Hace un tiempo, en lugar de estar festejando mi cumpleaños, estaba teniendo un día horrible. Entonces, decidí ir a comprarme un pastel en el supermercado, ya que quería algo lindo para esa ocasión especial. Cuando la persona que estaba en el mostrador preguntó para quién era y le dije que era para mí, no podía creer que tuviera que comprar mi propio pastel de cumpleaños. Simplemente me encogí de hombros y esta persona me dijo que tendría que pagarlo una vez que lo terminaran de decorar. Luego de eso, seguí con mi compra. Cuando regresé para pagar y recogerlo, había otra persona en el mostrador y me dijo que ya habían pagado por mi pastel. Cuando abrí la caja, vi que estaba decorado mejor de lo que esperaba. No he visto a esa persona trabajando allí desde entonces, pero me gusta pensar que fue el hada de los pasteles. © mamblepamble / Reddit
• En París no todas las estaciones de subterráneo cuentan con acceso para sillas de ruedas. Una vez nos quedamos atascados porque la estación accesible estaba cerrada y nos desviaron a otra parte. Dos tipos se acercaron, recogieron a mi suegra en su silla, la cargaron por un tramo a través del torniquete y por un tramo más hasta la plataforma. Lo hicieron rápidamente y no querían nada más que las gracias a cambio. Creo que ni siquiera se conocían. © LowerSeaworthiness / Reddit

• Una vez, mi familia y yo nos perdimos de camino a Disneyland París cuando tenía 13 años. Mi papá y mi mamá no sabían hablar francés y yo apenas sabía lo que me habían enseñado en la escuela. Vimos a una mujer y le pregunté cómo llegar a nuestro destino. En vez de indicarnos cómo ir, condujo delante de nosotros todo el camino hasta el lugar en el que aparecían las señales de tránsito que mostraban el camino. © Lanceth115 / Reddit
• Mientras me dirigía hacia el trabajo una mañana, un camionero me preguntó: “¿Cómo estás?”, a lo que yo le respondí que me encontraba bien. Entonces, él dijo: “No te preocupes. Todo estará mejor”. Me alegró el día. Mi novia y yo habíamos terminado la noche anterior. Me sentía realmente triste hasta que este hombre que nunca había visto me aseguró que todo iba a estar bien. © PCnuggles / Reddit
• Mi hija trabajaba en un hotel de Turquía. Una vez llegó una pareja con un niño pequeño. Eran buenas personas y su hijo llevaba consigo su juguete favorito, un búho de peluche. Siempre lo llevaba consigo. Pasaron las vacaciones y los huéspedes se fueron a casa, pero olvidaron el juguete en la habitación. Después de un tiempo, llamaron al hotel y pidieron que les enviaran el muñeco por correo, ya que el niño no podía ni comer ni dormir sin él. Mi hija inventó una historia para el niño: el búho quería descansar un poco más en el hotel, regresaría después y prometió enviar una foto todos los días. Mi hija tomó unas cuentas fotos y las enviaba mientras el paquete iba en camino de regreso a su dueño.

• Un extraño me ayudó con mi tarea de matemáticas mientras estábamos en el subterráneo. Me enseñó a usar la fórmula cuadrática en ese viaje. Qué buen hombre. © DEFEZMAN / Reddit
• Una vez detuve mi auto al costado de la carretera porque se había descompuesto la batería. Un hombre se estacionó y me entregó una nueva. Resulta que él iba de camino a su casa para reemplazar la suya y no le molestaba darme la que había comprado. Incluso se llevó mi batería descompuesta. © rgraves22 / Reddit
• Todos lo llaman Pedro. Él lleva trabajando 15 años como chofer de autobús en la ruta de nuestro pueblo a la ciudad. A lo largo de todo ese tiempo, ha hecho cientos de favores. Nosotros lo conocimos hace varios años. En ese entonces, mi esposo tenía una discapacidad y debía viajar varias veces a la ciudad para continuar con el tratamiento. Pedro pasaba por nosotros cerca de la casa y, rumbo a la ciudad, al dejar a los pasajeros, hacía un desvío para llevarnos al hospital y me ayudaba a llevar a mi esposo hasta la entrada. A las 12:00 terminábamos y él pasaba por nosotros. Hoy tomé el autobús con Pedro. Hablamos y le recordé la ayuda que nos había brindado, pero él lo había borrado de su memoria. Para él, eso fue algo simple, solo un poco de amabilidad.

• Estaba andando en bicicleta y se me cayó la billetera del bolsillo. Una mujer la recogió y pedaleó detrás de mí durante 15 minutos hasta que pudo alcanzármela. La pobre estaba sin aliento, ya que tuvo que ir detrás de mí todo ese tiempo y yo suelo pedalear bastante rápido. No podía estar más agradecido de que se hubiese tomado la molestia de seguirme y devolvérmela. © dapumpeddwarf / Reddit
• Esto ocurrió cuando era estudiante. Una vez, entré a una tienda para comprar comida. En la caja de pago, me di cuenta de que no tenía dinero en la tarjeta, así que tuve que dejar los productos. Me sentía muy triste y avergonzado. Salí a la calle pensando en dónde pedir prestado. De pronto, una mujer salió de la tienda y me dijo que había visto lo sucedido. Me comentó que tenía un hijo que estudiaba al igual que yo y que él también había estado en situaciones similares. Me abrazó y me puso un poco de dinero en el bolsillo. Estaba conmocionado, no podía ni decir una sola palabra. Por primera vez en una semana, pude comer algo normal. Ella cambió mi actitud hacia los demás. Espero que la vida la recompense. © Ageati / Reddit

“Esta señora tejió todos estos gorritos para un albergue. ¡Es increíble!”

• Mi esposo y yo éramos muy jóvenes y no teníamos nada de dinero. Un día de diciembre, alguien dejó en la entrada de nuestro hogar una caja llena de regalos para nuestro hijo y también había un poco de dinero para que pudiéramos comprar algunas cosas. Lo único que pudimos hacer fue llorar. © otherm0ther / Reddit
• Ayer, después de un día difícil en el trabajo, pasé por una tienda de camino a casa. Me dirigí hacia la puerta al mismo tiempo que un joven y, por costumbre, me hice a un lado para permitirle entrar primero. Sin embargo, él sostuvo la puerta para que yo pasara. Le dije: “Muchas gracias, caballero”, y él respondió: “De nada”. En la caja registradora, noté las hermosas uñas de la cajera. “Tus uñas son espectaculares”, le dije. Entonces, respondió: “Gracias, ¡acabas de alegrarme el día!”. El joven de la puerta luego dijo: “¡Tú también me alegraste el día! Estaba pensando que hoy le iba a decir a mi mamá que soy un caballero y que me agradecieron un gesto como tal”. Sonrisas por todas partes. © ghettofab / Reddit

“Entré a Starbucks llorando después de una pelea con mis padres, por lo que me tomó un poco de tiempo ordenar mi café. La barista escribió esto en mi vaso y no me cobró, lo que me hizo llorar aún más. Me dejó darle un abrazo y definitivamente, es mi nueva barista favorita”

“¡Eres increíble! ¡Superarás esto!”.

¿Qué actos de bondad han realizado otros por ti? ¿O tal vez te gustaría compartir la historia de un gesto de generosidad que tú has tenido? ¡Nos encantaría saber!