Ahora lo vi todo
Ahora lo vi todo

19 Personas que no pudieron apagar la luz mientras escuchaban los relatos de sus niños

Los más chiquitos de la casa, pueden contar historias que probablemente los adultos podamos tomar como fantasiosas. Podríamos creer que todo es producto de su imaginación, pero igualmente sean reales o no, podrían helar la sangre de más de uno.

En Ahora lo vi todo, somos fanáticos de los peques y encontramos relatos donde los más grandes de la casa temblaron ante lo que los infantes les contaron.

  • Mi hija, cuando tenía 2 años, me contaba que en otra vida era un ave que un día se clavó una espina en el ala y ya no pudo volar. Me decía que había dos portales, uno arriba y otro abajo, y que quería subir al de arriba, pero como ya no podía volar, entró al de abajo y que ahí apareció en mi panza. © Nora Torres / Facebook
  • Mi hijo tenía 2 años cuando me decía que veía a un señor sentado en un sillón de la sala. Un día visitamos la casa de mi padre y había una fotografía de él. Mi hijo, cuando la vio, dijo: “Mami, este es el señor que está en nuestra casa”. Yo me quedé sorprendida, ya que él no llegó a conocer a su abuelo, pues murió 5 meses antes de que naciera. © Teresa Reyes Flores / Facebook
  • Mi nieta de seis años me dijo cuando tenía dos años que me amaba mucho porque ella era mi mamá. Mi madre falleció un mes antes de que ella naciera. © Lucy Castro Alvarez / Facebook
  • Cuando mi hijo tenía un año y medio, conversaba con un amigo imaginario. Un día, mientras buscaba unos documentos, me dijo cómo se llamaba. Después de unos minutos, encontré en un certificado de nacimiento el nombre de ese amigo imaginario: era el del bisabuelo de mi esposo. © Maria Caro / Facebook
  • Estaba viendo unas fotos del mar junto a mi tía. Mi hijo de dos años se asomó y nos dijo: “Yo era buzo, andaba abajo del mar. A veces me subía a un submarino pequeño. Pero una vez, mientras nadaba, me picó una mantarraya. Me dolió mucho”. © Ross Guz Cal / Facebook
  • Mi hijo a sus dos años le preguntó a su abuela si no se acordaba de cuando él le daba de comer cuando ella era pequeña. © Alvaro Martinez / Facebook
  • Una vez vi a mi niña de tres años muy pensativa y serena. Le pregunté en qué estaba pensando y me dijo que se estaba acordando de cuando era un ángel, en un momento en el que nosotras todavía no nos conocíamos. © Blanca Lidia Piggeonoutt Rodríguez / Facebook
  • Cuando mi nieto tenía tres años, jugábamos y me decía: “Abuela, cuidado con las alas del ángel que está a tu lado”. Decía que veía a tres ángeles que nos cuidaban. © Marja Leonor Maldonado / Facebook
  • Una vez mi hija, a los 4 o 5 años, entró del patio llorando. Cuando pudo calmarse, me dijo que había visto a un duende con un gorro violeta y las orejas puntiagudas. Tiene 11 y aún lo sigue recordando. © Javier Claros / Facebook
  • Cuando mi hijo tenía un año y medio, estábamos viendo una película y nos dijo: “Un gato”. Unos segundos después apareció un gato en la pantalla. Con mi esposo nos miramos y le pregunté: “¿Ya la había visto?”. Me contestó que no. © Conny Hernandez / Facebook
  • Mi hijo me dice: “¿Te acuerdas de cuando fuimos a tal lado?” o me cuenta historias en las que jamás estuve. También recuerda cosas de cuando era demasiado pequeño. © Mai Msc / Facebook
  • Mi hija de tres años me preguntó por qué su hermanito era niño cuando antes, al estar con ella en mi panza, había sido niña. Yo había estado embarazada de dos bebés y había perdido una niña. © Marjorie Lorena Hurtado Cortes / Facebook
  • Mi hijo cuando era pequeño me decía que lo tenía que cuidar de la misma forma en la que él me había cuidado cuando yo era niña. © Angelica Jaramillo / Facebook
  • Mi hijo menor asegura que era una niña cuando estaba en mi panza, pero como el padre deseaba tanto que fuera un niño, cambió para darle el gusto. © Loreley Pestana / Facebook
  • En cierta ocasión, cuando mi hijo tenía casi dos años, me acarició la cara y sonriendo me dijo que él me había visto desde el cielo y me había elegido para que fuera su mamá. Lo miré, le di un beso y le contesté que yo también lo había elegido como mi hijo. Me miró desconcertado y me dijo: “¡No! Yo te vi cuando caminabas por un puente, ibas con un vestido bonito y pedí que tú fueras mi mamá”. Lo abracé y le dije: “Gracias por haberme elegido”. Me dio un beso y sonrió. © Hope BN / Facebook

¿Cuál es la historia más tenebrosa que tus hijos te han contado?

Imagen de portada Hope BN / Facebook
Compartir este artículo