Ahora lo vi todo
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Aenne Burda, la humilde ama de casa que llevó la empresa fallida de su marido a dominar el mercado editorial

La moda es un mundo cambiante. Por eso mismo, aquellos medios que se encargan de notificar tendencias en las tiendas y las pasarelas llevan años en el mercado debido al constante flujo de novedades. Entre ellos, la revista Burda Style se destaca, no solo por su revolucionaria propuesta, sino la maravillosa historia detrás de su éxito. Aenne Burda, una mujer que buscaba su deseada independencia por medio del arte en cada nuevo volumen que se imprimía, lideró la publicación y dejó un legado que hoy en día se mantiene.

En Ahora lo vi todo nos quitamos el sombrero ante la tenacidad de Burda, quien reformó una empresa destinada al fracaso para convertirla en un nombre importante de las publicaciones editoriales.

Aenne (en el extremo derecho) junto con sus padres y sus hermanos.

Aenne Burda, nacida como Anna Magdalene Lemminger, llegó al mundo el 28 de julio de 1909, en la ciudad de Offenburg, Alemania. Su padre era conductor de una locomotora, y su madre era ama de casa. Por eso, la familia vivía de forma bastante humilde.

Desde temprana edad, Aenne se dio cuenta de que no quería repetir el destino de su madre: no le gustaba la ocupación de ama de casa. Ella quería algo más grande y mejor.

A Anna le encantaba destacarse de los demás. Cuando era joven, se hizo un atrevido corte “bob”, mientras que todas las otras chicas se hacían trenzas. Casi al mismo tiempo cambió su nombre por el de Aenne, en honor a la heroína de su canción favorita, Ännchen von Tharau.

Después de graduarse de la escuela de monjas y estudiar en la universidad, Aenne comenzó a trabajar como cajera en una compañía de electricidad. Un día, un joven bastante agradable fue a pagar su factura de la luz: era Franz Burda. Él era dueño de una pequeña imprenta. Los jóvenes se gustaron y un año después se casaron.

Durante casi 20 años, Aenne realizó diligentemente el papel de esposa y madre ejemplar. Ella cuidó de la casa y dio a luz a 3 hijos: Franz, Frieder y Hubert. El negocio editorial de su marido iba bien, y podría parecer que la mujer se había sacado la lotería. Sin embargo, Aenne sentía que le hacía falta algo: su naturaleza activa y creativa quería cambiar las cosas.

A veces, el destino puede ser muy gracioso y cumplir nuestros sueños de una forma muy original. Resultó que, durante muchos años, su marido había financiado una editorial poco rentable, Elfi-Moden, la cual le pertenecía a Elfriede Breuer, una exsecretaria con la que tuvo un romance. Aenne tenía 40 años cuando se enteró del engaño de su marido.

Sin embargo, después de descubrir que la exsecretaria de su esposo había dado a luz a su hija ilegítima, Aenne no pidió el divorcio, sino que obligó a su marido a negarse a financiar a Elfi-Moden y solicitó su apoyo para registrar la editorial bajo su nombre.

En 1949, ella se convirtió en la jefa de la editorial, la cual contaba con 48 empleados en ese momento. Pronto lanzó la revista de moda Favorit, que a partir de 1950 llevó el nombre Burda Moden. Por cierto, Aenne conservó su matrimonio, pero después de este suceso, los cónyuges pasaron a tener una relación exclusivamente comercial. Además, contrató asistentes para ayudarle con las tareas del hogar y cuidar de los niños.

Por supuesto, no fue fácil comenzar una nueva vida a los 40, especialmente porque Aenne no sabía coser ni publicar revistas. Pero, por otro lado, sabía perfectamente lo que quería: ser autosuficiente, exitosa, y ayudar a otras mujeres a verse a la moda y con estilo.

La nueva dueña de la empresa se sumergió por completo en su trabajo. Buscaba modistas y fotógrafos, y ella misma elegía las mejores modelos y fotografías. Paralelamente, Aenne estudió Industria Editorial, desarrolló un nuevo diseño para su revista de moda y conoció a diseñadores. Ella pasaba de 10 a 12 horas en la oficina.

Su principal idea innovadora fueron las hojas de patrones, que formaban parte de la revista desde 1952. Con estos, las personas podían coser ropa de forma con sus propias manos, prendas que eran mostradas por modelos en las pasarelas. Mientras que la ropa de otras revistas seguía siendo inaccesible para la mayoría de los lectores, Aenne logró crear una publicación que permitió a una gran cantidad de mujeres vestirse con elegancia y buen gusto, sin gastar una gran cantidad de dinero en ello.

La idea de Aenne funcionó al 100 %, porque sabía exactamente lo que necesitaban las mujeres. En ese momento, había poca ropa confeccionada, y lo que se vendía era muy caro. Sin embargo, la tela era más accesible y muchas sabían coser. No fue de sorprender que Burda Moden pronto comenzara a venderse no solo en Alemania, sino también en muchos otros países.

Hacia 1961, su revista se convirtió en la edición de moda más grande del mundo, con una tirada de 1,2 millones de ejemplares. Aenne literalmente conquistó el planeta y se volvió la reina de la moda.

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Después de la muerte de su marido, Aenne conquistó otra altura inalcanzable: en 1987, Burda Moden se convirtió en la primera revista occidental publicada en la Unión Soviética. Entonces logró borrar no solo las fronteras culturales, sino también políticas.

A los 77 años, Aenne Burda realizó una presentación de su revista y un desfile de modas en la Casa de los Sindicatos en Moscú. Fue una verdadera revolución cultural. Cada mujer invitada recibió una bolsa de regalo con una frase escrita: “La moda no conoce fronteras”. Además, dentro de ella se encontraba un ejemplar de una nueva revista y un kit de cosméticos jamás visto.

Aenne gobernó su imperio durante 45 años, y todos los meses se dirigía a los lectores desde las páginas de la revista en forma de una carta. Cuando cumplió 85 años, traspasó la editorial a sus 3 hijos. Sin embargo, Frieder y Franz vendieron sus acciones a su hermano, Hubert Burda, el cual tomó la decisión de encargarse de ella.

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  • Durante su merecido retiro, Aenne decidió finalmente dedicarse a su pasatiempo y se aficionó a la pintura al óleo. Además, desde su juventud fue una gran fanática de los coches deportivos de lujo y continuó completando su colección con nuevos ejemplares.

  • Aenne Burda también fundó varias organizaciones caritativas. Contribuyó al desarrollo de la cultura y el arte, cuidaba de los ancianos y apoyó a las personas necesitadas en su ciudad natal, Offenburg.

  • La legendaria mujer falleció en 2005, a los 96 años. Pero su negocio sigue existiendo: hoy, la revista lleva el nombre de Burda Style, y se publica en 17 idiomas en más de 100 países.

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En 2018, en honor al aniversario de los 110 años de Aenne, el canal de televisión alemán ARD estrenó una película en dos partes. Esta cuenta la historia de éxito de esta mujer increíblemente enérgica y talentosa que pudo crear un milagro económico con sus propias manos.

¿Qué es lo que te ha resultado inspirador de la vida de Aenne Burda? ¿Qué otro ícono de la moda te causa admiración?

Imagen de portada Hubert Burda Media / Wikimedia Commons, CC BY-SA 3.0, CLAUS HAMPEL / ASSOCIATED PRESS / East News
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