Chica vive la peor pesadilla de una mujer en una cena con su novio y sus suegros
Una joven tenía una cita con su novio y su familia y, para no tener que usar el baño de una casa ajena, se le ocurrió tomar un laxante antes. Pero los tiempos no la ayudaron y terminó teniendo una experiencia “explosiva”. Una simple cena se convirtió en un momento inolvidable, con varias visitas al baño.
La joven se llama Camila y es una argentina que reside en Colombia. En el video, relata cómo un pequeño error en sus cálculos arruinó sus planes y la llevó a vivir una incómoda situación durante la cena en al que conocería a la familia de su novio por primera vez.
Tenía planeado pasar todo el fin de semana en la casa de los padres de su pareja, pero había un pequeño inconveniente: “Yo no sentía la confianza suficiente para sentarme a hacer caca en su casa. Me da mucha vergüenza”, explicó la chica.
Después de evaluar la situación, a Camila se le ocurrió ingerir un medicamento laxante el viernes por la mañana, con la intención de que surtiera efecto a lo largo del día y en la noche, para así tener “todo bajo control”. Sin embargo, cometió un grave error: “No leí las indicaciones, que decían que tardaría 8 horas en hacer efecto. Nunca pensé que tardaría tanto tiempo en funcionar. ¿Y qué ocurría en 8 horas? Él venía a buscarme”, señaló la joven.
Podía cancelar los planes o, por otro lado, ir a la casa de su novio y esperar que el laxante no hiciera efecto. Camila optó por la segunda opción y vivió una experiencia aterradora durante la cena junto a su pareja y su familia. “Fue el momento más terrible que experimenté en mi vida”, confesó Camila.
“Todo comenzó, me levanté, sin decir nada, y salí corriendo al baño”, confesó la joven. Durante la noche, tuvo que abandonar la cena en varias ocasiones para dirigirse rápidamente al inodoro. Su novio, al notar algo inusual, le preguntó qué le estaba ocurriendo, ella le reveló la verdad y le dijo con humor: “No entres a tu baño nunca más en tu vida”.
Este episodio creó “un lazo de confianza indestructible” con su pareja, quien reaccionó de la mejor manera ante la situación que le tocó vivir a Camila visitando muchas veces el inodoro. ¡Qué viva el amor, y el poder hacer las necesidades sin culpa!