“Es mi hijo”, hombre se viraliza tras luchar mano a mano contra un oso para salvar la vida de su perro
¡Qué hombre tan valiente! Porque, bueno, seamos sinceros, ¿cuántos de nosotros estaríamos a la altura de una hazaña así? Este señor tan chido le hizo frente a un oso gigante (¡Qué miedo!) que tenía agarrado a su bebé perro y estaba a punto de matarlo. El desenlace de esta historia es de admirar. ¡Aquí te tenemos todos los detalles!
La historia de Kaleb Benham, quien, valientemente, se enfrentó a un oso gigante, se volvió viral. ¿Cuál fue el motivo de esta batalla? La respuesta es simple: salvar la vida de su querido perro, quien estaba siendo atacado por el oso y se encontraba en grave peligro. Para él, su perro era como un hijo. Muchos consideran a este hombre un verdadero héroe, ya que se rehusó a dejar el futuro de su mascota en manos del destino. Este acontecimiento tuvo lugar un día antes del Día de Acción de Gracias, en Nevada, California. Todo parecía ser una jornada normal, hasta que la inesperada visita del oso cambió por completo la situación.
Mientras el perro pitbull de Kaleb jugaba despreocupadamente en el césped, se escuchó un gruñido extraño que provenía del bosque cercano. La vegetación empezó a moverse y, de repente, apareció un imponente oso de alrededor de 150 kilos. Kaleb, preso del pánico, intentó huir mientras llamaba a su perro, pero desafortunadamente el oso se abalanzó sobre él. Con su enorme mandíbula, sujetó al perro firmemente por la cabeza. El pitbull luchaba con todas sus fuerzas por liberarse, pero el oso lo arrastraba sin piedad hacia el interior del bosque.
Kaleb no dudó en regresar de inmediato. El miedo fue reemplazado por una determinación férrea: salvar a su perro. En ese momento, olvidó por completo el peligro que representaba el oso y se enfrentó valientemente al animal. En primer lugar, le propinó unas patadas y luego agarró su lomo para detenerlo. Los ataques de osos son extremadamente peligrosos, y muy pocas personas han logrado sobrevivir a ellos. Incluso animales más pequeños, como los perros, tienen pocas esperanzas de salir ilesos. Incluso los ejemplares de la raza pitbull, conocidos por su fuerza, rara vez escapan con suerte en situaciones así.
Sin embargo, el hombre tomó la decisión de luchar. Se aferró al cuello del oso en un intento desesperado por salvar a su perro, pero el imponente animal continuaba mordiendo a su mascota. Fue entonces cuando decidió probar algo diferente: introdujo sus manos en la mandíbula del oso y trató de abrirlas. Era una tarea casi imposible separar esas poderosas mandíbulas. En medio de la desesperación, comenzó a lanzar puñetazos y luego ideó una estrategia inteligente: golpear los ojos del oso. Sus golpes impactaron en los ojos del animal y le causó molestia, por lo que el oso soltó al perro. El hecho de golpearle en el ojo había surtido efecto. Benham se sintió diminuto cuando el oso se puso de pie, pero el agresor, con el ojo dañado, decidió marcharse.
Ahora, ¿qué sucedió con el perro? Desafortunadamente, había sufrido graves heridas en el ataque. Las heridas de la mascota requirieron cuatro horas de suturas. Quedó severamente lastimado, con cicatrices profundas. Sin embargo, su dueño se siente feliz de haberlo rescatado. Para él, su perro es como un hijo y no podía dejarlo solo en ese momento de peligro.
Si bien para algunas personas no es tan natural establecer vínculos tan fuertes con sus mascotas, otras no pueden imaginar su vida sin ellas, a tal punto de que prefieren saltar a un pozo y morir con tal de salvarlas.