Chico le hace un vestido de fiesta a su hermana que estaba triste por no tener dinero para su graduación
Hay momentos en la vida de todo ser humano que se quedan tatuados en el corazón, como el primer día de escuela, algún cumpleaños o un reencuentro con una persona muy querida. La lista puede ser infinita, pero hay veces en las que las circunstancias pueden atentar contra nosotros y hacernos perder experiencias irremplazables. Eso fue lo que le sucedió a la hermana de Maverick Francisco Oyao y él, al ver lo triste que estaba ella al no poder ir a su graduación por no tener dinero para un vestido, no se quedó con los brazos cruzados e hizo su deseo realidad.
Creemos en la importancia de ayudar a los que amamos y por eso quisimos compartir la historia de Maverick y su gran hazaña.
Todo comenzó cuando la escuela anunció el próximo baile de graduación, pero una pareja de padres no podía permitirse alquilar un vestido de fiesta para su hija. Sin embargo, la hermana de Maverick moría de ganas de asistir al baile.
Maverick se sentía extremadamente triste por todo el asunto, y fue entonces cuando se le ocurrió la idea de crear un vestido con los materiales asequibles que pudo encontrar en el mercado. Pero como era tan difícil de hacer, desistió. Sin embargo, al ver a su hermana tan triste, Maverick decidió intentarlo de nuevo. Buscó diferentes tipos de vestidos de fiesta en YouTube y Google y se encontró con la colección de primavera y verano de Michael Cinco; allí vio un vestido que le gustó y decidió crearlo con sus propias manos.
“Este era mi primer día. Estaba nervioso y no sabía por dónde empezar. Corté 9 piezas de tela azul, las decoré con una cinta de raso y las cosí todas juntas para hacer una falda”.
“Como no había espacio suficiente dentro de la casa, mi hermana tuvo que probarse la falda en la calle. El 50 % del trabajo estaba hecho, el vestido estaba casi terminado”.
“Coloqué unos detalles de flores en la falda”.
“Pinté con el color azul ombré la parte de arriba para que encajara con la paleta de colores de la falda. Cuando llegaba a casa de la escuela, trabajaba en el vestido. A veces me cansaba mucho, pero al imaginar el resultado, conseguía la energía para continuar el trabajo”.
“Lo que más me gusta de todo el vestido son las mangas”.
“Y por fin, ¡ese día que nunca olvidaré! Incluso lloré de alegría, porque todas esas noches sin dormir dieron sus frutos”.
“Y aquí estoy con mi hermana. No esperaba terminarlo a tiempo. Incluso dudaba si podía hacerlo o no, porque el concepto era diferente al que ya estaba haciendo anteriormente. Estoy muy satisfecho de ver a mi hermana feliz”.
¿Qué momentos has vivido que recordarás por toda la vida? ¡Nos encantaría conocer tus historias!