Una pareja dio en adopción a su cerdita, pero su destino tuvo un indignante final
El caso de una cerdita llamada Roma ha conmocionado a la opinión pública en las redes. Tras ser entregada en adopción por una pareja que no podía cuidarla adecuadamente, la trágica noticia de su destino ha generado indignación y tristeza. Un amigo de la pareja aceptó adoptarla, y la familia pensó que estaban enviándole a una nueva vida, en su lugar, se desataron conflictos legales y controversias en torno al caso.
En Argentina, una pareja se vio en la necesidad de encontrar un nuevo hogar para su cerdita debido a su incapacidad para cuidarla adecuadamente. La adorable Roma había crecido más de lo esperado y el espacio disponible en casa ya no era suficiente para brindarle una buena calidad de vida.
Ante esta situación, Mariela tomó la difícil decisión de buscar a alguien que pudiera hacerse cargo de Roma. Estableció requisitos sencillos pero importantes para los posibles adoptantes: disponer de espacio adecuado en su hogar, tener tiempo suficiente para dedicarle y, lo más importante, ofrecerle amor.
Por suerte, un familiar de un amigo cercano se presentó como voluntario para adoptar a la cerdita. ¿Qué mejor opción que dejar a Roma en manos de alguien conocido?
Tras los primeros días, aparentemente todo iba bien con la cerdita. El nuevo propietario de Roma enviaba fotografías a la pareja para mostrarles cómo estaba. Mariela se tranquilizó, ya que parecía que todo marchaba correctamente. No obstante, unos días después, recibió una noticia extremadamente perturbadora: el adoptante se había comido a Roma.
Según las declaraciones de Pieroni, el nuevo dueño de la cerdita adoptada, no estaba satisfecho con su comportamiento. Roma resultaba demasiado inquieta para su gusto, y en un momento de frustración, la llevó a un matadero y la entregó, con la condición de que él pudiera quedarse con algunos trozos de carne.
Las conversaciones entre Mariela y el adoptante de la cerdita fueron compartidas en un grupo de Facebook en Argentina que promovía la adopción responsable. En uno de los audios, el nuevo dueño de la cerdita menciona que “la chancha ya estaba en otro plano”.
Pieroni afirmó que el adoptante ha dejado el asunto en manos de sus abogados y lo considera simplemente como una maniobra informática en su contra, a pesar de que fue él quien publicó la selfie con Roma y admitió haberla sacrificado. Mariela se encuentra en un estado de gran angustia, ya que ha recibido amenazas y ha sido denunciada por difamación. Ambos se sienten asustados y tristes. Harán todo lo posible para buscar justicia en esta situación", declaró Pieroni.
No importa qué tanto se desee, las cosas no siempre terminan como lo esperamos. Así lo confirma también el caso de una chica que le arrojó las llaves del coche a su amiga, pero terminó causando un verdadero desastre (¡no olvides pasarte a darle un vistazo!).