Cómo es que tu bebé se forma dentro de tu vientre durante los 9 meses de embarazo
Imagina que un espermatozoide y un óvulo son dos amigos que viven en diferentes partes del cuerpo. Un día, se encuentran y deciden juntarse para formar una nueva aventura juntos. Se unen y forman un embrión que es un pequeño explorador listo para comenzar su viaje en el vientre de mamá. Luego, el embrión experimenta diferentes etapas de desarrollo hasta convertirse en un feto y, finalmente, en un bebé. ¿No es una aventura genial? ¡Echa un vistazo para ver los detalles!
Cómo y cuándo ocurre el embarazo
Contrariamente a la creencia popular, no se considera el comienzo del embarazo el momento de la concepción en sí, sino el primer día de la última menstruación anterior, que ocurre aproximadamente 2 semanas antes de la fecundación.
Cada mes, el cuerpo de una mujer en edad reproductiva pasa por un ciclo que puede terminar en embarazo o en menstruación (si no se produce el embarazo). El ciclo que termina con el embarazo pasa por varias etapas. Cada óvulo inmaduro se va desarrollando dentro de un saco lleno de fluidos, llamado folículo. Cuando uno de estos óvulos madura, su propio folículo detiene la evolución de los demás; luego se abre y el óvulo sale del ovario hacia la trompa de Falopio, listo para la fertilización. Este momento se llama ovulación.
Después de la ovulación, el folículo del que se liberó el óvulo se convierte en una glándula temporal llamada cuerpo lúteo. La glándula comienza a secretar hormonas que contribuirán al buen curso del embarazo. Una de esas hormonas, la progesterona, ayuda a preparar el revestimiento del útero, el lugar donde se depositará y desarrollará un óvulo fertilizado.
Primer trimestre
Se considera que el primer trimestre es el tiempo que transcurre desde el momento de la concepción hasta el momento en que el feto tiene 12 semanas. Durante este período, un grupo de células se desarrollará hasta convertirse en un feto, que comenzará a tomar las características de un niño.
1.er mes después de la concepción (1.a a 4.a semana)
Dentro de las primeras 24 horas, un óvulo fertilizado comienza a dividirse rápidamente en muchas células. Después de la fecundación, permanece en la trompa de Falopio durante aproximadamente 3 días más y luego comienza a moverse lentamente hacia el útero.
En el útero, el óvulo deja su capa protectora y se adhiere al endometrio (el revestimiento del útero). Cuando se completa la implantación, el endometrio comienza a engrosarse y la abertura entre el útero y el canal de parto se bloquea con un tapón mucoso.
Durante las primeras 3 semanas, se forma un embrión a partir de un óvulo fecundado, que se denomina embrión hasta la semana 8, y después se llama feto hasta que nace el bebé.
A medida que el óvulo crece, comienza a formarse una membrana impermeable a su alrededor, que se llena gradualmente de líquido, el llamado saco amniótico. En el futuro, protegerá al feto de daños.
Comienza su desarrollo la placenta, el órgano por el cual el feto recibe nutrientes de la madre
y, a su vez, desecha productos metabólicos.
En las primeras semanas, los contornos primarios de la cara toman forma en el embrión y comienza la circulación sanguínea. Al final de la cuarta semana, un diminuto tubo, el corazón rudimentario, latirá alrededor de 65 veces por minuto.
En la cuarta semana, el embrión crece hasta alcanzar el tamaño de una semilla de amapola.
2.º mes (5.ª a 8.ª semana)
Gradualmente, a partir del tubo neural comienza la formación del cerebro y la médula espinal, proceso que se completa en la séptima semana. En este momento, el cerebro embrionario ya consta de 3 áreas: el prosencéfalo, el mesencéfalo y el rombencéfalo. Y continúa desarrollándose activamente.
Comienza a formarse el sistema digestivo. Se forman el estómago y el esófago, el hígado y el páncreas.
Los rasgos faciales continúan desarrollándose. Aparecen manchas oscuras en el lugar de los ojos y las fosas nasales del embrión, y pequeñas depresiones en el lugar de las orejas. Comienzan a formarse la lengua y las cuerdas vocales. Para la semana 7, los ojos del embrión ya tienen todas las partes estructurales principales.
Aparecen las primeras formaciones de las extremidades, que eventualmente se convierten en brazos y piernas.
A la octava semana, comienza el desarrollo del sistema respiratorio; el niño empieza a hacer los primeros movimientos, que aún son demasiado débiles para que la madre los sienta.
En la quinta semana, el embrión ya tiene el tamaño de una semilla de sésamo; en la sexta, el tamaño de una lenteja. Para la semana 7, crece hasta el tamaño de un arándano, y en la semana 8, parece un frijol mediano.
3.er mes (9 a 12 semanas)
Se forman 4 cámaras separadas en el corazón del bebé. El cerebro se está desarrollando y el tamaño de la cabeza aumenta significativamente: durante este período tiene aproximadamente la mitad de la longitud de todo el feto.
Hacia la novena semana se desarrollan 10 dientes en cada encía, que permanecerán allí hasta que crezcan meses después. Para la semana 10, los dientes comienzan a endurecerse y se fusionan con el hueso de la mandíbula.
En la semana 10 aparecen los párpados sobre los ojos del bebé, los cuales estarán cerrados hasta las 27 semanas. Y al final de la semana 11 se desarrollan los órganos por los cuales pronto será posible determinar el sexo del bebé.
En la semana 12, aparecen los primeros reflejos: la boca comienza a hacer movimientos de succión, los dedos de las manos se contraen y se aflojan. En este momento, los brazos y las piernas del feto ya tienen 5 dedos y comienzan a aparecer los primeros vellos finos en la piel.
Al final del tercer mes, todas las estructuras principales del feto están completamente formadas.
Para la semana 9, el feto crece hasta el tamaño de una uva; en la 10, es como un tomate cherri. En la semana 11, se vuelve del tamaño de un higo, y en la 12, del tamaño de una lima.
Segundo trimestre
Es el período del embarazo durante el cual el feto desarrolla sus rasgos faciales. La madre ya puede sentir su movimiento y, con la ayuda de una ecografía, puede averiguar el presunto sexo del bebé. Por lo general, dicha exploración se lleva a cabo en la semana 20.
4.o mes (semana 13 a 16)
Al comienzo del segundo trimestre, comienza el entrenamiento de los músculos faciales del bebé. Aprende a hacer diferentes muecas, realiza movimientos de masticación y se chupa el dedo. En este momento, el bebé se está convirtiendo cada vez más en una personita. Ya tiene pelo, cejas y pestañas. En la semana 13, comienzan a formarse líneas finas en los dedos del feto, que luego serán las huellas dactilares. Un poco más tarde, también aparecerán uñas delgadas y translúcidas en las manos y en los pies.
Comienza el desarrollo del cuerpo. Se forma un cuello más prominente, que separa la cabeza del torso. Los brazos se vuelven proporcionales a todo el cuerpo, se desarrollan las piernas. En las próximas semanas, el feto duplicará su peso y sumará varios centímetros de longitud. En este momento, el corazón del feto bombea alrededor de 25 litros de sangre todos los días, y esta cantidad aumentará a medida que se desarrolle.
Para la semana 13, el bebé comienza a producir de forma independiente las primeras heces, el meconio, que la madre podrá detectar en los primeros pañales después del nacimiento.
En la semana 15, en el feto comienzan a formarse las papilas gustativas, cuyo desarrollo final se completará en la semana 20.
En la semana 13, el feto es comparable en longitud a una vaina de guisante; en la semana 14, con un limón. A las 15 semanas, el bebé crece hasta alcanzar el tamaño de una manzana promedio, y a las 16, el de un aguacate.
5.o mes (semana 17 a 20)
En la semana 17, el esqueleto del feto se vuelve más sólido, el tejido cartilaginoso se reemplaza por huesos. Comienzan a desarrollarse las glándulas sudoríparas.
Para la semana 18, los pulmones fetales se ramifican, en ellos se distinguen estructuras más pequeñas, los bronquiolos, en cuyos extremos se forman burbujas de aire, los alvéolos. Cuando nace un bebé, son estas burbujas, enredadas en pequeños vasos sanguíneos, las que permiten que la sangre oxigenada circule a todos los tejidos y órganos.
En las niñas, se completa la formación de las trompas de Falopio, que durante este período ya están en su lugar.
A las 19 semanas, los brazos y las piernas del bebé se vuelven proporcionales al cuerpo. Las áreas responsables del olfato, el tacto, el gusto, el oído y la vista aparecen en el cerebro. El feto ya puede escuchar los latidos del corazón de la madre.
En la semana 20, cuando las piernas del bebé ya no están apretadas contra el cuerpo, la longitud se mide de la cabeza a los pies (antes de esto, la longitud fetal se medía desde la cabeza hasta la parte inferior del torso).
A las 17 semanas, el bebé se vuelve del tamaño de un nabo; a las 18, de un pimiento; a las 19, de un tomate grande. Para la semana 20, la longitud del feto alcanza el tamaño de un plátano.
6.º mes (de la semana 21 a la 24)
Si en la semana 22 el feto puede distinguir solo sonidos débiles dentro del cuerpo de la madre, como la respiración, los latidos del corazón o los sonidos del tracto digestivo, para la semana 23 puede escuchar sonidos que le llegan desde el exterior, por ejemplo, el ladrido de un perro.
A los 6 meses se activa el peristaltismo en el organismo del bebé, que tras el nacimiento, trasladará los alimentos a través del tubo digestivo. Y aunque antes del nacimiento el feto se alimenta a través del cordón umbilical, tales movimientos ondulatorios prueban el funcionamiento del sistema digestivo y sirven como entrenamiento.
El sistema respiratorio continúa su desarrollo, preparando al bebé para la respiración independiente fuera del útero materno.
Durante este período, el niño se ve más bien delgado, aunque su cuerpo ya está formado y completamente proporcionado. Su piel sigue siendo fina y translúcida. Pero pronto el bebé comenzará a aumentar de peso, y la piel se irá volviendo cada vez más parecida a la que estamos acostumbrados a ver en los bebés.
A las 21 semanas, el bebé ya tiene el tamaño de una zanahoria; a las 22, el tamaño de una calabaza pequeña. A las 23 semanas se puede comparar con un mango grande y a las 24 semanas, con una mazorca de maíz.
7.º mes (de la semana 25 a la 28)
En este momento, cada vez aparece más vello en el cuerpo del niño, que ya tiene un color y una textura determinados.
En la semana 26, el bebé ya puede escuchar una amplia gama de sonidos, así como distinguir la voz de la madre. Con la ayuda de movimientos, cambios en la respiración y los latidos del corazón, puede responder a diversos estímulos.
Para la semana 27, los ojos del bebé ya pueden responder a la luz y los párpados pueden cerrarse y abrirse. Si iluminas la barriga con una linterna, podrás sentir un movimiento, que será una reacción a tus acciones.
A partir de este período, la madre también puede sentir leves contracciones rítmicas en el interior del abdomen. Este es el hipo del bebé, que puede volverse común en las próximas semanas.
El cerebro del feto continúa desarrollándose rápidamente. Durante este período, aparecen miles de millones de nuevas células nerviosas, su peso aumenta. Un poco más tarde, en el tercer trimestre, aparecen surcos profundos y sinuosos en el cerebro, por lo que el área del órgano aumenta, pero el espacio que ocupa en el cráneo sigue siendo el mismo.
Para la semana 25, el bebé crece hasta el tamaño de un nabo mediano; para la semana 26, se vuelve similar en longitud a un manojo de cebollines. A las 27 semanas, su tamaño aumenta al de una coliflor y a las 28, al de una berenjena grande.
Tercer trimestre
Durante el tercer trimestre, el feto gana rápidamente el peso que necesitará después del nacimiento.
❗ Aunque en la cultura popular siempre se mencionan solo 9 meses de embarazo, un embarazo a término típico es de 40 semanas y se puede “estirar” hasta los 10 meses.
8.o mes (semana 29 a 32)
Aumenta la fuerza de los huesos y se incrementa la actividad motriz del feto.
A partir de la semana 30, el bebé es capaz de distinguir los contornos borrosos de los objetos. Las pupilas de sus ojos ya saben contraerse y dilatarse, dejando entrar más o menos luz. En la semana 32, esta habilidad se complementará con la capacidad de mantener la atención en objetos grandes ubicados a corta distancia.
Hay un aumento activo de peso. Durante las próximas 7 semanas, el bebé ganará de 1/3 a 1/2 del peso corporal total con el que nacerá.
A las 29 semanas, el bebé se vuelve del tamaño de un calabacín; a las 30, del de una col; a las 31, de un coco; a las 32, de una jícama grande.
9.º mes (semanas 33 a 36)
El bebé sigue aumentando de peso. Las arrugas de su piel se suavizan, la piel misma se vuelve menos transparente y más suave.
Ya tiene reflejos coordinados: puede parpadear, cerrar los ojos, girar la cabeza, apretar y soltar los dedos, responder a la luz, al sonido, al tacto. Sus pulmones y riñones están completamente desarrollados, y el hígado comienza a realizar parcialmente sus funciones.
En la semana 33, el feto es similar en tamaño a una piña; en la semana 34, a un melón; en la 35, a un melón grande. Al comienzo de la semana 38, el bebé alcanza el tamaño de una lechuga romana.
10.º mes (semanas 37 a 40)
A pesar de que todos los órganos y tejidos principales ya se han formado, el niño continúa aumentando de peso. La capa de grasa subcutánea que el bebé acumula en el útero en este momento le ayudará a controlar su temperatura corporal después del nacimiento.
Para la semana 37, el feto ya tiene el tamaño de una hoja de acelga; para la 38, de un puerro. A las 39 semanas, el bebé tiene aproximadamente el tamaño de una sandía pequeña, y a las 40 semanas, el tamaño de una calabaza pequeña.
¿Cuáles son los desafíos que enfrentaron tú o alguna de tus conocidas durante el embarazo? Nos gustaría conocer tus historias.