Qué pasa en tu metabolismo y en tu cabeza al ducharte todos los días

Para nadie es un misterio que las duchas y los baños sean de los espacios más relajantes que podamos experimentar. Son el mejor alivio para los bajones emocionales y los dolores físicos. Aunque quizás no nos demos cuenta de que los beneficios van más allá de darnos un tiempo para consentirnos. Cuidar de nuestra salud mental y física es importante para llevar una vida plena, por lo que elaboramos una lista de los múltiples beneficios que la simple práctica de bañarse tiene en nuestro bienestar.

1. Puede ayudarte a respirar mejor

Darnos baños puede tener un impacto positivo en los pulmones y en la cantidad de oxígeno que ingresa a nuestro sistema respiratorio. Si, además, el agua está caliente, el resultado será aún mejor. Esto se debe a la presión que el agua caliente ejerce sobre el pecho: el vapor despeja las vías y los senos paranasales y, en consecuencia, facilita la respiración.

2. Puede hacer que te veas más joven

Quizá creas que tu piel está seca porque no tiene suficiente grasa, pero no es así. La piel busca formas de mantener el agua, especialmente durante los meses más fríos del año. Por eso, bañarse contribuye a que absorba humedad.

El baño no solo ayuda a combatir la sequedad de la piel, sino que también tiene propiedades antienvejecimiento, como mejorar su elasticidad, suavizarla y reducir las posibilidades de que aparezcan arrugas y líneas de expresión en el rostro.

3. Puede ayudar a combatir la depresión

Aunque hay muchas formas de tratar la depresión en la actualidad, hay menos posibilidades de obtener ayuda a través de tratamientos estandarizados y, además, estos pueden tener efectos secundarios. En conclusión, no pierdes nada con probar una forma alternativa y natural. Quizá incluso empieces a sentirte mejor después de tan solo 5 baños calientes.

4. Puede ayudarte a dormir mejor

Tomar un baño una o dos horas antes de acostarse puede ayudarte a conciliar mejor el sueño, lo que será especialmente útil para las personas mayores o aquellas que sufren de insomnio.

Tomar un baño caliente puede ayudarte a relajarte y a sentirte menos estresado, sobre todo si has estado experimentando ansiedad y no has dormido bien como consecuencia. Los baños también ayudan a aliviar los músculos y a relajar cualquier tejido que esté tenso. Algunos estudios han demostrado que escuchar música cuando nos damos un baño puede calmar la respiración y disminuir la presión arterial.

5. Puede aliviar los músculos doloridos

Meterse en una bañera llena de hielo no es la única forma de aliviar los músculos doloridos, ya que un baño caliente también puede funcionar. Darse un baño tibio con sales de Epsom puede ayudar a relajar esos músculos adoloridos y a aliviar el dolor.

Si bien es cierto que los baños calientes pueden ser beneficiosos después de un entrenamiento, no deberían reemplazar los estiramientos; más bien pueden servir como un apoyo.

6. Puede animarte a ser más consciente del presente

Estar en el momento presente significa buscar un estado de plena consciencia y relajación, donde puedas despejar tus pensamientos de cualquier problema que puedas tener. Los baños pueden ayudarte en este proceso de estar en el presente, y también guiarte a encontrar soluciones a tus problemas.

Qué hacer:

1. Pon una iluminación suave en tu baño
2. Cierra los ojos y respira profundamente
3. Ignora los pensamientos negativos
4. Permanece en la bañera durante más de 20 minutos

¿Cuánto crees que es la duración razonable para disfrutar de un tiempo en la ducha?