Niña se coló a un cumpleaños y su mamá se enojó porque no le dieron pastel “¡Es tan cruel!”
La forma cruel e insensible en que le negaron el postre a la niña enfureció a su madre y a muchas personas que escucharon la historia, pero ¿Su indignación está justificada?
La historia tuvo lugar en un encantador día soleado en un parque, donde una mujer y su hija de 3 años, llamada Mary-Katherine, disfrutaban de su tiempo juntas. El ambiente era apacible, salvo por un grupo de personas que celebraban un cumpleaños infantil en una zona cercana.
La pequeña, con su encantadora y sociable actitud, se acercó a los demás niños y jugaron y rieron sin problemas durante más de treinta minutos. La madre, Kat, se alegraba al ver a su hija divirtiéndose y supuso que la pequeña había sido bien recibida en el grupo.
Sin embargo, todo cambió rápidamente cuando llegó el momento de repartir el pastel de cumpleaños. Mary-Katherine, emocionada por unirse a la celebración, se acercó a pedir un trozo, pero se llevó una sorpresa desagradable. La madre del niño que cumplía años le arrebató el plato y le comunicó que no podía comer porque no había sido invitada y ninguno de los niños del grupo era su amigo.
La pequeña se encontraba perpleja y desilusionada, sin comprender por qué había sido excluida repentinamente después de haberse divertido con los demás. Como cualquier madre preocupada, Kat se sintió indignada por el trato que recibió su hija.
“Me acerqué para asegurarme de que estuviera bien que tomara una rebanada, como una formalidad. Honestamente, pensé: ’obviamente estará bien. Es solo pastel. Hay más que suficiente para todos’”, comentó la mujer. “Luego, la madre le arrebató el plato a MK, se agachó a su altura y le dijo: ’No puedes comer este pastel, ¿entendido? Esta no es tu fiesta de cumpleaños. Estos no son tus amigos. ¿Dónde está tu madre?’”, recordó.
Kat se sintió impotente frente a la crueldad de la madre del niño que cumplía años y decidió acudir a las redes sociales en busca de orientación. Compartió su experiencia y preguntó si su reacción fue exagerada o si realmente estaba en lo correcto.
La reacción que siguió fue abrumadora. Cientos de personas expresaron su apoyo a Kat y a Mary-Katherine, considerando que la madre del niño que cumplía años había actuado de manera insensible y cruel. Muchos argumentaron que independientemente de la edad, excluir a un niño de una celebración infantil era inaceptable y podía dejar secuelas emocionales duraderas.
“Es simplemente desastroso”, “¿Qué madre decente le dice a una niña pequeña que ha hecho nuevos amigos que no puede comer pastel?”, “Es tan despiadado. ¿Quién hace eso a una niñita? ¡Es tan cruel!”, “Algunas personas son verdaderamente malvadas” y “Definitivamente es un momento de aprendizaje para tu pequeña. No todos son amables ni actúan con el mismo nivel de cortesía”, fueron algunos de los comentarios manifestados.
Los niños pueden ser, en muchas ocasiones, mucho más amables y considerados que los adultos. Los pequeños tienen un gran corazón que los puede llevar incluso a dejar de comer por ayudar a sus amigos.