Personas

Muchas veces podemos creer que objetos o alguna parte de nuestra casa son una causa perdida, ya sea por el desgaste del tiempo o por simple suciedad. La reacción más normal puede ser querer tirarlo o pensar que no hay nada que se pueda hacer por mejorar la situación, pero siempre se les puede dar una segunda oportunidad a las cosas. Un recipiente, una manta o una terraza pueden lucir absolutamente nuevos al limpiarlos profundamente.

Twitter y otras redes sociales pueden ser el diario de muchos usuarios. En sus páginas podemos encontrar todo tipo de situaciones, desde las más graciosas hasta las más enternecedoras, listas para hacernos llorar a moco tendido. Estas últimas acapararon nuestra atención, y es que a veces no hay nada mejor que leer un buen drama y meterse en la historia como si fuéramos uno más de los protagonistas, ¿o no?

Una de las sensaciones más difíciles a las que se tiene que enfrentar el ser humano es no estar conforme con su apariencia. Muchas veces pensamos que solo las mujeres experimentan estas inseguridades, pero la verdad es que los hombres también viven este sufrimiento en silencio y atreverse a hacer algo al respecto cuenta como un acto de valentía admirable. Y es que es bien bonito poder mirarse al espejo y querer lanzarse piropos uno mismo, ¿no?

Diariamente nos vemos sometidos a diversas situaciones, y algunas de ellas resultan ser increíbles. Cuando esto sucede, muchas personas tienen la fortuna de tomar una fotografía para hacer que la emoción perdure a través del tiempo. Una propuesta de matrimonio o la primera vez del cachorro en la playa pueden resultar instantes mágicos.

A veces no hay nada más vergonzoso que revisar fotos viejas de nosotros mismos. Las modas cambian (y nosotros también, por suerte), pero no es raro encontrarse con algunas imágenes que nos hacen pensar que en algún momento lucíamos de una manera que hoy nos resulta difícil de creer.

La famosa edad de la punzada. ¡Ah, qué recuerdos! Esos años dorados en los que creemos que nos podemos devorar el mundo de un solo bocado y en los que les sacamos canas verdes a nuestros papás. Sin embargo, los años pasan y una vez que nos convertimos en padres de un adolescente, vemos todo muy diferente de como lo veíamos en aquel entonces. Y ¡zúmbale! Ahora entendemos lo que nuestros sabios papás vivieron.

Vivimos en un mundo donde la mayoría de la gente está acelerada y busca llegar a su destino lo más rápido posible. Por esta razón, los servicios de taxi se han vuelto parte importante de nuestra vida, y es muy común que cada uno tenga una historia arriba de este transporte. ¿Sabes quiénes también deben tener un reportorio de anécdotas? Los conductores. Si les preguntáramos, seguro podrían contarnos muchas cosas interesantes sobre su trabajo.

En los últimos años y con la concientización sobre la conservación del planeta, las tiendas de segunda mano se han multiplicado a lo largo y ancho de las ciudades. La verdad es que antes nuestras mamás iban a ese tipo de locales a rescatar algunos elementos para el hogar, pero ahora hasta las influencers cuentan sus historias sobre cosas fabulosas e inesperadas que encontraron en estas tiendas. Aunque no hay nada más inesperado que encontrarse “una fortuna” oculta en un objeto usado, ¿no?

Es reconocida la faceta de los más pequeños de decir lo que piensan sin tapujos. Esta muestra de total sinceridad puede ser divertida, pero también avergonzar a más de un padre. Las siguientes personas se animaron a compartir cómo fue el momento en que la brutal honestidad de sus hijos los hizo querer esconderse para siempre.

La pérdida de peso afecta a diferentes partes del cuerpo, pero es en la cara donde más se nota el cambio. Cuando bajas 45 kilos, la papada desaparece, y eso por sí solo supone una gran diferencia. Por suerte, las redes sociales están llenas de personas que nunca se rindieron y decidieron mostrarnos sus asombrosos triunfos después de un largo “viaje de pérdida de peso”.

Muchas mujeres sueñan con el día en el que darán el “sí” en el altar. Pero los planes para llegar a ese momento tan esperado pueden correr un serio riesgo cuando el vestido y la organización de la fiesta de bodas se salen del presupuesto. Sin embargo, si se investiga con voluntad, la novia puede vestirse y verse muy bella. Hay tesoros escondidos a precios realmente accesibles. Solo hay que saber buscarlos.

Nunca falta la mamá que, ante las coincidencias insólitas del cine, exclama a viva voz: “¡Tenía que ser una película!”. Si somos sinceros, nos hemos acostumbrado a pensar que esas situaciones sospechosamente oportunas solo pueden ocurrir en la ficción; sin embargo, a veces la vida se encarga de demostrarnos, con pequeños detalles, que puede ponerse muy creativa con nuestras vivencias.

Cuando uno compra algo, espera con ansias el momento de abrirlo, de estrenarlo, de comerlo, pero... ¡qué desilusión cuando lo que ordenamos no luce como esperábamos! Si en algún momento te pasó, puedes tener la certeza de que no fuiste el único. Como prueba de eso, algunas personas se animaron a compartir las fotografías de lo que adquirieron y su desencanto.

Con frecuencia, solemos pensar que los demás aplicarían la lógica del mismo modo que nosotros. La verdad es que en este tipo de situaciones es cuando la frase “cada cabeza es un mundo” hace su mejor entrada. ¿Cuántas veces no hemos visto personas que actúan como si las neuronas se les hubiesen desenchufado del cerebro? Pues bien, no somos los únicos que hemos tenido que respirar profundo ante los cortocircuitos de los demás.

Existen personas que limitan su humor al color de las nubes oscuras durante un día lluvioso. Hay otras que, a pesar de que ven que la tormenta se avecina, lo toman como una oportunidad para sacar su bote inflable y navegar por el vecindario inundado; por último, están los que reutilizan la madera de un árbol caído en lugar de tirarlo a la basura. Muchas veces ignoramos que nosotros tenemos el poder de cambiar el rumbo de nuestro día tan solo si nos enfocamos en lo positivo y estamos dispuestos a sacarle provecho.

El sentir añoranza por algún evento del pasado es algo que puede pasarnos a todos en algún momento, y es allí cuando algunos acudimos a fotos anteriores para revivirlos o para comparar cómo hemos cambiado a través del tiempo.

La lógica de la vida indica que vamos adquiriendo conocimientos a medida que acumulamos experiencias y anécdotas. Sin embargo, hay bebés que parecen llegar al mundo con toda la sabiduría que necesitarán a lo largo de su existencia. Hay retoñitos cuya apariencia de viejitos es tan adorable que parecen dispuestos a aconsejar a toda su familia justo después de salir del vientre de su madre.

Muchas personas disfrutan día a día su trabajo, mientras que otras tareas son realizadas por algunos a quienes pareciera no gustarles su empleo. Ya sea porque no les importa el resultado o porque probablemente ni se dieron cuenta de lo que hacían, de cualquier forma, son situaciones que podrían sacar de sus casillas hasta al jefe más tranquilo.

Tarde o temprano, algunos de nosotros hemos caído en la tentación de comprar un artículo ya sea porque la imagen del empaque nos llamó la atención o porque nos ofrecía resolver de manera sencilla un problema. Sin embargo, al abrirlo, nuestras expectativas cayeron al piso, ya que el producto resultó ser un completo fiasco.

Quienes tienen mascotas en casa saben que no todo es color de rosa, algunas veces sus travesuras dejan unos cuantos objetos dañados o nuestra piel arañada. Aquellos dueños de perros y gatos que están a la espera de un bebé podrían preocuparse por cómo se comportarán al ver al nuevo integrante, o cómo reaccionarán al escuchar sus llantos. Habrá animales que inmediatamente asumirán el rol protector de hermano mayor, lo que facilitaría enormemente esta nueva transición y conmoverán a toda la familia con su buen comportamiento.