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Joven con síndrome de Down supera los prejuicios y brilla como modelo

En Estados Unidos, aproximadamente 1 de cada 700 bebés nace con síndrome de Down. A pesar de las dificultades que enfrentan estas personas, esto no les impide cumplir sus sueños de la misma manera que nosotros, y creemos que la inspiradora historia de Kennedy García lo demuestra.

Un camino difícil

El inicio fue difícil para Kennedy, al igual que para muchas personas con síndrome de Down. Pasó mucho tiempo en el hospital, pero con la ayuda de los médicos, su familia y su propia determinación, así como una actitud positiva, logró superar todos los obstáculos que la vida le puso en frente.

“A pesar de todo, ha superado muchos desafíos. Ha tenido leucemia, más de 30 cirugías y una cirugía de fusión de columna cuando era pequeña. Ha tenido un camino difícil, pero siempre ha mantenido una actitud positiva y una sonrisa, incluso en los momentos más difíciles, cuando estaba muy enferma o sufriendo dolor”.

El sendero hacia el éxito

Modelar y actuar son habilidades innatas para ella y desde una edad temprana, pudo perseguir sus sueños con éxito. Kennedy siempre ha disfrutado posando ante la cámara, lo que la llevó a comenzar a modelar ropa de boutique a los 6 años. Las tiendas pequeñas le enviaban ropa, y su familia les enviaba fotos a cambio. Esta experiencia temprana le permitió perfeccionar sus habilidades de modelaje y allanar el camino para su carrera en la industria del entretenimiento.

Cuando tenía 10 años, la página de Instagram de Kennedy llamó la atención de la tienda en línea American Girl, que se comunicó con su agente y le ofreció su primer gran trabajo en Los Ángeles. Kennedy amó cada segundo de la experiencia y quedó enganchada, lo que la llevó a seguir modelando y construyendo su carrera en la industria del entretenimiento desde entonces. Esta oportunidad temprana fue fundamental para su éxito en el mundo del modelaje.

Pero este no es su único talento y pasión, antes de su carrera en el modelaje, la danza siempre ha sido el primer amor de Kennedy. Comenzó a bailar a los 5 años de edad después de recuperarse de una cirugía de columna. Empezó en una pequeña clase de ballet y luego se trasladó a un equipo de competencia a los 6 años. Su cariño por la danza la ha llevado a desarrollar habilidades excepcionales que la han ayudado a desarrollarse como ser humano y que, por consiguiente, han sido una gran ventaja para su carrera en la industria del entretenimiento.

Kennedy es actualmente la única miembro con necesidades especiales en su equipo de competición de baile, y a través de esta actividad, ha encontrado a sus mejores amigas. La danza la ha desafiado, empujado y enseñado la importancia de trabajar en equipo y aprender de las pérdidas. Su amor por su familia de baile es tan grande que es probable que siga siendo una parte clave de su vida incluso después de graduarse. Su dedicación y talento han llevado a Kennedy a alcanzar el éxito en múltiples áreas, y su pasión por la danza sigue siendo una fuente de inspiración y motivación para ella.

Claves del éxito: perseverancia y apoyo

Durante 16 años, Kennedy y su familia han experimentado altibajos, pero afortunadamente, las cosas positivas han sido mucho más significativas que las negativas. Gracias al amor, apoyo y libre albedrío, Kennedy ha podido prosperar haciendo lo que le gusta, mientras que su familia, su novio y amigos han jugado un papel clave en ello. Es esencial encontrar un equilibrio entre la vida social y el trabajo.

“En nuestro viaje, hemos enfrentado desafíos, pero después de 16 años, lo positivo ha superado ampliamente lo negativo. Cuando nació y se le diagnosticó síndrome de Down, los médicos nos dieron una perspectiva muy sombría sobre su futuro... Sin embargo, Kennedy ha demostrado constantemente que estos médicos estaban equivocados, ya que ha creado su propio camino y ha demostrado al mundo su capacidad”.

Su madre ha estado presente en su vida desde su nacimiento, viéndola crecer, dar sus primeros pasos en muchas áreas, presenciando sus caídas y también sus salidas adelante. A pesar de los comentarios negativos de los expertos, que le dijeron que Kennedy nunca podría hacer ciertas cosas, ella ha demostrado constantemente su capacidad. La mujer que la trajo a este mundo se siente muy afortunada de ser la madre de Kennedy y tener un papel tan importante en su vida, observando su desarrollo desde la primera fila.

Algunas lecciones de sabiduría

A pesar de los desafíos que ha enfrentado, Kennedy ha iluminado la vida de aquellos a su alrededor con su amabilidad y empatía. Su personalidad radiante ha dejado una marca en todos los que la conocen, y estamos agradecidos de que haya compartido algunos de sus consejos con nosotros.

Kennedy ha visitado escuelas locales para hablar con estudiantes de secundaria y preparatoria sobre el síndrome de Down y cómo hacer amigos con personas discapacitadas. Ella les aconsejaba que, cuando conocieran a alguien con discapacidad, simplemente saludaran y hablaran con ellos, lo que podría dar lugar a una amistad duradera. Kennedy tiene razón: no tiene que ser difícil o complicado.

Las personas con síndrome de Down u otras discapacidades son como el resto de nosotros. En su cuenta de Instagram, Kennedy muestra su día a día como una adolescente típica. Le encanta comprar, enviar mensajes de texto a sus amigos, pasar tiempo con su novio, comer comida chatarra y hacer todo lo que hacen las chicas de su edad. A través de su cuenta, Kennedy demuestra que si la gente le diera la oportunidad, podrían descubrir que es una gran amiga y muy divertida.

Las personas con discapacidades forman parte de nuestra sociedad y están presentes en las escuelas, vecindarios, lugares de trabajo y en todas partes. Por eso, es importante aprovechar la oportunidad de hacer nuevos amigos. Así que, si tienes la oportunidad de conocer a alguien con discapacidad, ¡no dudes en hacerlo!

Las personas con discapacidades, ya sea física, mental o sensorial, forman parte de nuestra sociedad, y se encuentran presentes en todos los ámbitos de la vida. Desde la escuela, donde pueden necesitar ciertas adaptaciones para un aprendizaje pleno y efectivo, hasta los vecindarios, donde a menudo enfrentan barreras para la movilidad y la accesibilidad, pasando por el mundo laboral, donde luchan contra la discriminación y el estigma.

A pesar de esto, muchos aún desconocen cómo interactuar con personas con discapacidad, lo que puede llevar a la exclusión y al aislamiento social. Por eso, es crucial aprovechar cualquier oportunidad para hacer nuevos amigos y aprender sobre las experiencias y desafíos que enfrentan las personas con discapacidad.

Por lo tanto, la próxima vez que te encuentres con alguien con discapacidad, no dudes en acercarte y hablar con ellos. Pregúntales acerca de sus intereses, pasatiempos y sueños. Escucha sus historias y perspectivas. Y sobre todo, trátalas de la misma manera que tratarías cualquier otra persona: con respeto, empatía y amabilidad.

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