Chica que ha vivido en Corea del Sur por más de 20 años revela lo que sus novelas no muestran

Desde el 2001, Olga ha estado viviendo el sueño de todo fanático del k-pop y los k-dramas: despertar todos los días en Corea del Sur. Todo comenzó como una visita al país por primera vez en un gira de un grupo de baile, pero al conocer al que sería su futuro esposo, decidió embarcarse en una nueva aventura y conocer de primera mano lo que es mudarse a otro país. Allí aprendió el idioma y recibió una educación. Y es gracias a esta experiencia que puede revelarnos los pequeños pero intrigantes detalles de la cotidianidad coreana.

Vivienda

• La mitad de la población de Corea del Sur vive en apartamentos llamados “apats”, que pueden ser altos o bajos. Esto se debe a la mentalidad colectivista de los habitantes y no tanto a la densidad de población. Estos edificios suelen tener características similares, como un territorio vallado, un estacionamiento subterráneo y un gimnasio gratuito. Además, los apartamentos se alquilan con acabados completos y electrodomésticos incluidos.
• No hay diferencias de clase en los apats, el costo solo varía según el área. La vida útil de estos edificios es de 30 a 35 años y luego son demolidos para construir nuevos. Los coreanos prefieren alquilar viviendas debido a su movilidad y es común cambiar de departamento varias veces en su vida. Los apartamentos más populares tienen una superficie de un poco más de 100 metros cuadrados y suelen ser habitados por familias jóvenes con 1 o 2 hijos.
• En el territorio de los apats, la superficie de la carretera se pinta de rojo para que los automovilistas respeten los límites de velocidad. Los primeros pisos de los edificios no tienen tiendas, farmacias, cafés o peluquerías, ya que estos servicios se encuentran en construcciones separadas llamadas “sanga”.
• Los edificios en Corea se construyen siguiendo los principios del feng shui y se ubican de tal manera que los departamentos reciban suficiente luz solar. Además, siempre habrá un reservorio de agua natural o artificial cerca del edificio.

Clima

• La flora de Corea está compuesta principalmente de coníferas, aunque también se siembran setos resistentes a las heladas en las áreas urbanas. Esto hace que en invierno las fotografías puedan confundirse con las tomadas en verano.
• Sin embargo, esta impresión es engañosa, ya que en enero las temperaturas nocturnas pueden descender a −17°C, mientras que durante el día la temperatura promedio es de 0°C. En Corea existe una gran diferencia entre las temperaturas diurnas y nocturnas.
• Para protegerse del viento marino, lo más importante es usar chaquetas largas de plumas, ya que los abrigos de piel y las botas de fieltro no son adecuados para este clima.

Jardines de niños y escuelas

• En los jardines de infantes, se les enseña a los niños a cultivar verduras y a hacer huertos. Por ejemplo, mi hija menor, Angelina, pasó todo el verano cuidando unas batatas. En otoño, junto con su grupo del jardín, asaron parte de la cosecha en una parrilla. También hay unos espantapájaros que los niños hicieron juntos cerca.
• En Corea, no existen las actitudes habituales como “no hay que lastimar a las niñas”, “los niños no deben llorar” o “un niño debe cuidar a una niña y regalarle flores”. No se puede lastimar ni a un niño ni a una niña, se debe cuidar a los amigos sin importar el género, y todos pueden llorar si están tristes o dolidos.
• Los coreanos están luchando contra los estereotipos de género. La generación más joven es menos conservadora y la sociedad está cambiando rápidamente. Esto se refleja incluso en los libros de texto de orientación profesional, que indican que un niño puede convertirse en cocinero o enfermero, y que una niña puede ser piloto o jugadora de fútbol.

• El libro de educación física es el más voluminoso y enseña cómo utilizar adecuadamente diferentes equipos de entrenamiento, andar en bicicleta y hacer gimnasia.
• En la escuela, hay una materia llamada “Artesanía y Economía Doméstica”, donde se enseña a los niños a cocinar, lavar, planchar y manejar el presupuesto familiar.
• Además, los estudiantes deben tomar chino e inglés, que son obligatorios. Es común hacer los deberes en la escuela, y se les asigna un tiempo específico para ello.
• Los exámenes médicos se realizan dos veces al año y cubren diferentes análisis y exámenes corporales completos. Antes de la evaluación, se debe completar un extenso cuestionario que incluye preguntas sobre la dieta del niño y una prueba para detectar posibles tendencias suicidas. La escuela debe proveer certificados de tres vacunas: cáncer cervical, tétanos y encefalitis japonesa.

• En Corea, existe una ley que obliga a poner correa a los perros, incluso si son de tamaño muy pequeño. Si alguien se queja de un perro suelto, su dueño puede ser multado con una gran cantidad de dinero. Los coreanos generalmente no tienen perros grandes, y si los tienen, los mantienen solo en sus hogares privados, no en edificios.
• Aunque estés caminando con tu mascota en un área despejada, debes recoger los desechos que deje en el suelo. Sin embargo, no es necesario lavarle las patas después del paseo, ya que las calles de Corea suelen ser muy limpias. Después de la caminata, solo necesitas limpiar ligeramente las almohadillas de sus patas.

Comida

• En Corea, una caja de ostras frescas cuesta la mitad que un trozo de carne: 5 USD en comparación con 10 USD.
• A pesar de que los ingredientes son más baratos, comer en restaurantes resulta más económico que cocinar en casa, por lo que cocino casi nunca.
• Los puestos de comida callejera llamados Pojangmacha son muy populares entre los residentes y turistas en Corea. Estos surgieron en las calles después de la ocupación japonesa en los años 50 y 60, cuando la mayoría de la población del país era pobre y la gente podía comprar bebidas y bocadillos como saltamontes, cereales o gorriones fritos. Aunque los tiempos de hambre han terminado, los puestos siguen siendo populares, pero con un aspecto más moderno y sin los bocadillos espeluznantes.
• La comida coreana es muy picante, a veces tan picante que puede hacerte llorar. Para mitigar este efecto, los habitantes suelen acompañar su comida con kimchi, aunque este puede parecer demasiado picante para los paladares occidentales.
• Entre los aperitivos (banchan), es común encontrar namul, que son hojas de rábano, calabaza y otras verduras mezcladas con aceite de sésamo y salsas fermentadas.
• Los coreanos no acostumbran a comer solos. Las porciones en los cafés suelen ser para al menos dos personas, y si comes solo, los lugareños te mirarán con lástima. Además, la costumbre de “no hablar con la boca llena” no es relevante en Corea, ya que es normal hablar durante la comida.
• Durante el horario de mayor audiencia en Corea del Sur, los canales de televisión emiten programas culinarios en lugar de noticias o entrevistas. Para ellos, lo principal es comer rico y disfrutar de la comida. Por lo tanto, es considerada como la televisión más positiva del mundo.
  

Basura

• En Seúl, es común ver bolsas de basura en plena ciudad, lo que se debe a diversas razones. La ciudad está densamente poblada, especialmente en los barrios antiguos, y las carreteras secundarias son demasiado estrechas para los camiones de basura, por lo que se colocan en las calles más anchas.
• En Corea del Sur, es obligatorio utilizar bolsas de basura especiales y pagar por ellas. Si se utiliza cualquier otra bolsa, simplemente no se la llevarán y el infractor será multado. Es fácil enterarse de esto, ya que hay cámaras de vigilancia instaladas en los lugares donde se dejan los residuos. Por lo general, son los extranjeros quienes ahorran en bolsas de basura.
• Los coreanos tiran la basura una vez a la semana y la acumulan en un espacio especial. La única excepción son los desechos pequeños que se incineran, que se pueden desechar cualquier día. Todo se clasifica y en las zonas residenciales hay contenedores específicos para cada tipo de residuo, como paquetes de plástico, latas, papel, plástico duro, baterías y vidrio. Además, hay contenedores especiales para los residuos de comida que solo se pueden utilizar con una tarjeta especial.
• Para desechar muebles o electrodomésticos de gran tamaño, es necesario colocar en ellos calcomanías especiales que se pueden adquirir desde 5 USD.

Mentalidad

• En Corea, es común que los habitantes mantengan excelentes relaciones amistosas y comunicativas con aquellos que comparten sus intereses. Sin embargo, se suele ser cauteloso a la hora de compartir información personal o secretos, ya que podría utilizarse en su contra. A diferencia de los extranjeros que a menudo esperan desarrollar amistades profundas, los coreanos no tienen prisa por hacerlo.
• En Corea, es inusual encontrar familias monoparentales y el divorcio no es una opción popular. Para los habitantes del país, el matrimonio va más allá del amor y es una unión en la que tanto el esposo como la esposa deben trabajar ardua y constantemente.
• En Corea, se considera normal que los cónyuges duerman en camas separadas, ya que esto ayuda a ambos a dormir mejor y a relajarse. Esta práctica permite que cada uno mantenga su patrón de sueño sin alterar el del otro.
• En Corea, las mujeres embarazadas llevan un estilo de vida activo y los médicos no limitan su dieta ni actividades. Rara vez visitan al ginecólogo y algunos diagnósticos, como el aumento del tono uterino, no son comunes. Aunque el parto es de pago, se cubre parcialmente mediante un seguro estatal. Por diversas razones, las mujeres a menudo prefieren la cesárea al parto natural.