18 Mamás que pasaron de no querer mascotas a hacerlas sus “nenes consentidos”

Tener una mascota es trabajo duro que implica mucho compromiso y responsabilidad. Quizás sea por eso que en muchas familias no las tengan, aunque con bastante frecuencia, existe la inquietud de adoptar a una. La alegría que puede llevar un peludito a casa es indescriptible, al punto que, hasta los más fuertes de carácter también pueden enamorarse locamente de ellos.

En Ahora lo vi todo amamos los finales felices, por lo que reunimos estas evidencias de madres que cambiaron de opinión y se dejaron enamorar por sus ahora hijos de cuatro patas.

1. “Mi mamá: ¿PARA QUÉ QUIERES OTRO PERRO?”

2. “Mi mamá estaba reacia a la idea de cuidar a mis perros mientras me iba de vacaciones. Sin embargo, no quería que nadie más lo hiciera”

3. “La abuela dijo: ’No más mascotas’, hasta que llegó Lucy a casa”

4. “Mi mamá odiaba a los perros porque uno la mordió cuando era pequeña, pero ahora trata a nuestro perro como si fuera su propio hijo”

5. “Mi suegra le acaricia la pata a mi perro porque está preocupada de que esté deprimido, pero lo que no sabe es que va a la guardería para perros, tiene 3 camas y que lo llevo al parque casi todos los días”

6. “Abuela: ’¡Los perros son sucios y deben criarse solo afuera!’. También abuela: ’¿Quieres entrar? Déjame lavarte las patas para que puedas hacerlo’”

7. “¿Para qué quieres otro perro? Ahora me pregunta si voy a traerlo cuando la visite”

8. “Al crecer, siempre supe que mi mamá era de esas personas que les gritaba a las mascotas. Pero ahora, ella es la primera en preocuparse si nuestro gato se enferma”

9. “Mamá dijo que no podía tener un perro. Un año después, se tomaron fotos de estudio juntos”

10. “Al principio, mi mamá estab a preocupada porque Lulu era una mezcla de pitbull y otra raza. Ahora se refiere a sí misma como su ’mejor abuela’. Lulu es muy mimada”

11. “No solo no quería una mascota dentro de la casa, sino que tampoco le permitía subir a los muebles. Ahora, a veces se preocupa más por él que por mí”

12. “Antes no quería un perro, y ahora tiene un compañero de aventuras”

13. “Cuando vivía con mi mamá, ella muy seriamente decía que no a la idea de tener una mascota. Ahora, cuando la visito con mi perro, se la pasan acurrucados”

14. “Después de decirme que no cuidaría al perro, mi mamá le hizo esta pequeña carpa para que no le diera calor”

15. “¡No tiene permitido subirse al sofá!”

16. “Mi mamá y el gatito que no quería”

17. “Ella: ’Esa cosa no está permitida dentro de mi casa. ¡Va a vivir en el garaje!’... También ella:”

18. “Nunca quiso gatos porque decía ser ’extremadamente alérgica’, hasta que Cleo llegó a nuestras vidas”

¿Cómo fue el momento en el que un miembro de tu familia se enamoró de la mascota de la casa? ¿Tienes fotografías que lo demuestren?