Mascotas

Aunque a veces no nos demos cuenta, nuestras mascotas también pueden sentir celos, y con un solo gesto lo hacen notar. Algunos animales se pueden acostumbrar a ser el centro de atención, así que cuando algo se interpone en su camino, es posible que nos quedemos con alguna imagen graciosa para recordar.

Las mascotas son como bebés para nosotros, y hay pocas cosas tan tiernas como verlas dormir. Incluso quienes no comparten su vida con un animalito saben que cuando ellos descansan, tienen el poder de robarnos el corazón al instante con sus dulces y risueñas caritas.

Las mascotas, además de ser un miembro más de la familia, están presentes para mostrarnos que les falta muy poco para estar como Pinky y Cerebro, tratando de conquistar el mundo. Su inteligencia parece ser tal que hasta da la impresión de que entienden el idioma humano. Y, cuanto más tiempo pasan con nosotros, más se nos parecen.

La duración del embarazo en los seres humanos es, en promedio, de 40 semanas. En el mundo animal, sin embargo, las hembras pueden llevar en su vientre a sus crías por solo un par de semanas o por más de 365 días. Quizá en casa tengas mascotas que alguna vez pasaron por un período de gestación, por lo que pudiste experimentar en vivo y en directo todo el proceso. Esta vez te ofrecemos datos sobre distintas madres del reino animal.

La naturaleza tiene el poder de hacer a cada ser superespecial. En el caso de algunos animales, al darles facciones inusuales, no solo se ven más exóticos, sino también un 100 % más tiernos. ¿Un husky con cejas? ¿O un gatito con pulgares? Anótennos en esta fiesta de la lindura.

Los gatos pasan la mayor parte del tiempo durmiendo. Quienes tenemos pequeños felinos en casa sabemos que dedican pocas horas a jugar o cazar. Es por esto por lo que en sus momentos de descanso se adueñan de los muebles, los mesones de la cocina, e incluso los lavabos y las duchas. Estos bigotudos creen que cualquier espacio es suyo y no necesitan la autorización de nadie, porque ellos son los que mandan en su reino.

Los animales son una gran compañía. Nos levantan el ánimo cuando nos sentimos tristes y nos acompañan en todos nuestros logros, pero a veces la convivencia va más allá y pasamos a compartir hasta nuestro espacio personal. Así, tu perro te usa de almohada y tu gato se come el pastel para la fiesta que organizaste.

Es increíble lo rápido que las mascotas se ganan nuestro corazón. Es tan veloz, como el tiempo que tardan en dejar de ser unos bebitos para convertirse en los reyes de la casa. Muchas veces pensamos que tener un animalito bebé es sinónimo de ternura y encanto, pero podemos comprobar que a medida que se hacen más adultos, terminan comprándonos completamente, a tal punto que con solo mirarlos nos llenamos de serotonina.

Por lo general, a la hora de adoptar gatitos, la gente prefiere llevar a casa los de pelajes coloridos, ya sea por temor a ciertas supersticiones, o porque las fotos que publican los refugios no muestran el majestuoso color oscuro de los gatos negros. Sin embargo, los amantes de los felinos sabemos que todos, sin importar su raza o su tamaño, son criaturas encantadoras que pueden llegar a ser fieles y tiernos compañeros.

No hay nada como disfrutar de la compañía de nuestro mejor amigo peludo de cuatro patas, pero puede suceder que tenga algunos comportamientos fuera de lo normal. Un perro que pide que le sostengan las patas mientras pasa el camión de la basura o uno que mantiene un tubo de cartón en su boca mientras contempla a su humano fijamente dan muestras claras de que algunos vienen con una configuración diferente.

Para cada dueño, su mascota siempre será especial y la más bella, incluso si su apariencia tiene características inusuales. Pueden ser desde manchas en lugares que los hacen parecer otra cosa, hasta orejas en posiciones extrañas. Nuestros animales serán tiernos para nosotros eternamente. Después de todo, cómo lucen no es lo que importa, porque lo que vale son el cariño y la atención mutua.

Aquellos que somos amantes de los mininos sabemos que son animales curiosos a los que les gusta husmear por propiedades que no son de ellos. Pero cuando encuentran un lugar que les gusta, sin pedir permiso alguno se adueñan de él. Ciertos bigotudos tienen la suerte de encontrar una familia que los acoge y les brinda un hogar cálido.

Las mascotas pueden ser una excelente compañía en el hogar, pero no solo se limitan a eso. Algunas de ellas parecen tener comportamientos inexplicables para sus humanos. Un perro que trae a otro de regreso a casa o una gata que insiste en que sus dueños vuelvan a la cocina porque dejaron la estufa encendida son muestras de un intelecto fuera de lo común.

La típica historia se presenta en la mayoría de los hogares: alguien en la casa quiere una mascota, pero los hombres se niegan a recibirla y presentan razones para no hacerlo. Unos meses después de que llega el animal, resulta que son inseparables. En verdad muy pocos se resisten al amor de los amigos de cuatro patas, ni siquiera quienes estaban en contra de tenerlos.

El lazo que formamos con nuestras mascotas a lo largo de los años pareciera ser más fuerte que un roble. Los que hemos tenido la fortuna de traer a casa perros o gatos podemos asegurar que es una experiencia maravillosa verlos crecer desde que eran una pequeña bola de pelos. Ellos terminan por convertirse en un miembro más de la familia, nos acompañan en las buenas y en las malas, y muchas veces su mirada refleja agradecimiento y amor incondicional.

Nuestros amigos de cuatro patas son muy inteligentes y, en ocasiones, sorprenden tanto que nos pueden hacer dudar de que sean solo animales. Ya sea repitiendo lo que decimos muy claramente o percatándose de que nos burlamos de ellos, a veces parece que son más astutos que nosotros.

Los “border collie” son una raza originada en Escocia e Inglaterra, y se los usaba como perros pastores, sobre todo para trabajar con rebaños de ovejas. Son muy inteligentes y obedientes, por lo que muchas familias los eligen como la opción ideal para estar con sus bebés o niños. Sin dudas, parecen los animales perfectos y se ganan nuestros corazones con sus caritas cariñosas, incluso si es que pueden estar haciendo alguna travesura juguetona.

Se podría pensar que la compañía de una mascota es lo más tierno y lindo en el hogar, pero en algunas ocasiones, los animales son los dueños y amos del lugar. Un gato que enloquece cuando le toman una fotografía u otro que a las dos de la mañana parece estar poseído por las fuerzas del mal podrían hacer que sus humanos piensen dos veces si son afortunados en tenerlos.

No a todas las personas les gusta tener una mascota en su hogar. Algunas prefieren sus ropas y muebles libres de pelos, y otras afirman que es porque pueden ser muy ruidosas, apestosas o molestas. Sin embargo, pareciera que los animalitos saben exactamente quiénes “están en su contra”, ya que trabajan en derretir su corazón hasta ser aceptados y consentidos.

Para muchos de nosotros, las mascotas se convierten en nuestros “hijos” peludos, y como padres orgullosos, nos encanta compartir sus fotos en las redes sociales. No nos damos cuenta de que el tiempo vuela hasta que vemos sus imágenes de hace un par de meses o de años. Sin embargo, los seguimos consintiendo como cuando eran unos “chiquitines”.