8 Consejos para reavivar la relación de pareja si pasan demasiado tiempo juntos
Cuando comenzamos una relación amorosa, es común que deseemos pasar todo el día al lado de esa persona especial. Sin embargo, con el paso del tiempo suele ser contraproducente, ya que podemos caer en la rutina o en la pérdida de la individualidad. Eso no quiere decir que no amemos a nuestra pareja, sino que las cosas han cambiado y es necesario hacer ajustes para mejorar la forma de estar juntos.
Creemos que ni la costumbre ni la falta de espacio deberían ser un impedimento para un romance feliz, por lo que reunimos sugerencias que tal vez ayuden a lidiar con las complicaciones del amor.
1. No descuidar a la familia y a los amigos
La pareja ofrece un lugar cómodo, y por eso puede pasar que se descuiden otras relaciones. Esto puede generar “codependencia”, querer que todo gire alrededor de la pareja al punto que aíslan a uno de la vida social, laboral y familiar. Algunos de los rasgos de una persona con tendencia a la codependencia son el temor a la soledad, ansiedad, pensamientos obsesivos, pánico a la ruptura, entre otros.
Para que esto no llegue a un nivel nocivo, como puede ser comunicarnos solo con esa persona, dejar de lado sueños personales, objetivos laborales y otras relaciones afectivas; hay que reconocer esto a tiempo y no dejar todo ese otro mundo que también es parte importante de la vida.
2. En vez de suponer, es mejor preguntar
Está bien reflexionar sobre lo que necesita nuestra pareja, qué puede ayudarla, cómo podemos hacerla un poco más feliz. Pero muchas veces podemos tener una visión errónea de lo que el otro desea o requiere, y eso puede evitarse de una manera muy simple: preguntando.
Decir: “¿Qué necesitas?”, “¿Qué te irrita de mí?”, “¿Cómo puedo contribuir a tu felicidad?”, puede abrir un diálogo enriquecedor para ambos y evitar discusiones innecesarias.
3. Comprender el aburrimiento y sus razones
La sensación de estar aburrido es a veces sutil y resulta difícil reconocer si lo estamos o no. Pero este sentimiento puede aparecer de otras formas más sencillas de identificar: enojo, irritación, menor atracción. Si esto comienza a ocurrir, un buen ejercicio es preguntarse cuáles pueden ser las razones interiores que nos hacen sentir así, y si la rutina o el aburrimiento están acechando.
Algunas soluciones para esto pueden ser:
- retomar actividades que gustaban y que, por alguna razón, se dejaron de hacer;
- ser creativo en lo romántico;
- tener detalles con el otro;
- escapar unos días hacia algún lado.
Los caminos para romper con la rutina son tantos como uno lo desee.
4. Encontrar un equilibrio entre el tiempo en pareja y el tiempo solo
Mucho tiempo juntos puede llevar a compartir actividades que, quizás, si pudieran elegir, preferirían hacer por separado. No se trata de una falta de cariño hacia la pareja, sino de que hay cosas que simplemente uno prefiere hacer solo o con otras personas de su entorno. Por eso es importante ver qué cosas prefieren hacer juntos y cuáles no.
Las actividades domésticas diarias, como doblar la ropa, ordenar, sacar al perro, pueden también ser espacios para estar solo un momento. Es decir, si la separación física es posible, mejor. Esto equilibrará el tiempo juntos y el tiempo separados y hará que tengan cierto “distanciamiento” que los haga extrañarse, brindando emoción al reencuentro.
5. Sobrellevar la situación con humor
No solo es importante divertirse con amigos y familiares, sino que también es prioridad mantener el buen humor con la pareja. Se puede lograr proponiendo juegos, paseos, actividades. Incluso pensando alguna broma simple que le dé otro color a la rutina. Todo esto rompe con las repeticiones habituales a las que nos acostumbramos y brindan positividad al ambiente.
6. Considerar la terapia individual o en pareja, de ser necesario
La terapia no tiene por qué ser la última opción. En cierta medida, todas las personas pueden encontrar un beneficio en contar con un observador imparcial. Sentirse triste, abrumado, irritable o con desafíos en la pareja, puede ser un puntapié para pensar en un terapeuta. Ellos pueden brindar un apoyo emocional y ciertas herramientas para mejorar la salud mental y la comunicación y vida en pareja.
7. Invertir en la “autodiferenciación”
“Autodiferenciación” puede sonar complejo, pero quiere decir algo tan simple como “poder mantener el sentido sobre uno mismo, independientemente de la pareja”. Aquellos que aún en una relación pueden seguir siendo ellos mismos, en todos sus aspectos, disfrutan tanto de actividades en pareja como de experiencias solos sin sentir que deben “escapar” de su entorno o algo similar.
Invertir tiempo en las pasiones y en uno mismo hace que tanto el tiempo solo como el tiempo con la pareja se disfrute más. Tener experiencias independientes enriquece la relación y otorgan plenitud tanto a cada individuo como a la pareja.
8. Concentrarse en las cosas positivas del otro
A menudo podemos obsesionarnos con las cosas que nuestra pareja no hace tan bien, y es difícil abandonar esa sensación. Quizás el problema es una cuestión de perspectiva y uno permanece aferrado a los pensamientos negativos por diversas razones. Para intentar cambiar esta manera de ver las cosas, puede intentarse lo siguiente.
- cambiar el lenguaje corporal, ya que esto está ligado a la inseguridad y falta de confianza;
- comunicar esas emociones que acongojan;
- en vez de ver las cosas como problemas, pensarlas como desafíos;
- expresarse creativamente escribiendo, dibujando, bailando, etc.;
- refrescar la cabeza con un paseo, para salir del entorno habitual;
- enumerar todo aquello de la vida propia que vale la pena.
¿Crees que sea más difícil una relación en la que pasan mucho tiempo juntos o una en la que hay mucha distancia? ¿Por qué?