20 Personas que vivieron momentos vergonzosos, dignos de decir “trágame, tierra”

Muchos hemos vivido momentos vergonzosos en nuestra vida; desde caernos delante de nuestro amor platónico hasta darle “me gusta” a una foto de una persona a la que estábamos stalkeando en Instagram. La mayoría de esos momentos terribles pasan al olvido rápidamente; sin embargo, hay algunas situaciones tan embarazosas que quedan grabadas para siempre en nuestro recuerdo y hasta logran que a otros les dé “pena ajena” al escucharlas.

• A veces me siento algo tonta, pero en ese momento recuerdo la vez que mi amiga fue sola por primera vez a la gasolinera y le preguntaron: “¿Cuánto le ponemos?”. Ella respondió: “Mmm, no sé, póngale para que me dure una semana”. Y todo se vuelve más fácil. © pabanyaa / Twitter
• Una vez tuve que ir a comprar una prueba de embarazo y la vendedora, nerviosa, me preguntó: “Dios mío, ¿y qué te gustaría que fuera: niño o niña?”. Yo entre dientes le dije que me gustaría que fuera un resultado negativo. Ella se quedó paralizada y avergonzada. Para ser honestos, se lo merecía, ya que no tenía por qué hacer ese tipo de preguntas. © witchxcrafter / Twitter
• Si alguna vez sientes vergüenza por algo, simplemente recuerda que yo una vez comenté la foto de compromiso de una chica escribiéndole: “¡Tu papá y tú se ven increíbles!”, y después me enteré de que él era su prometido. © shayadzohair / Twitter
• Mi amigo se quejó durante unas cuantas semanas, ya que todos los días encontraba un aguacate en su césped. Sin embargo, ¿quién y para qué le arrojaría un aguacate? ¿Quién haría eso? Hoy simplemente se dio cuenta de que en su jardín está creciendo un árbol de aguacate. © MavenofHonor / Twitter
• Tengo el pelo largo y soy varón. Una vez, estaba en una fiesta sentado en el sofá y un chico, que solo me había visto de espaldas, se acercó y me susurró al oído: “Oye, ¿te compro algo de tomar?”. Me di la vuelta y el chico pegó un brinco hacia atrás. Entiendo que yo no era el más avergonzado, pero la gente se rio de los dos. Ahora ese chico es uno de mis mejores amigos. © CroMag / Reddit

La mezquindad excesiva puede no producir enojo, sino vergüenza ajena y aquí te traemos dos artículos sobre tacaños que hacen cualquier cosa con tal de ahorrar (uno y dos).

Si haces clic aquí puedes leer más momentos incómodos que rápidamente se convirtieron en historias divertidas.

• Pensé que nuestro cajero era sordo. Él era muy lindo, pero no sonreía. Una vez le di una nota en donde decía: “Eres muy lindo”, y él me respondió: “Ana, nosotros estudiamos en la misma escuela y en una ocasión me diste un golpe en la cabeza”. © flex_mad01 / Twitter
• ¿Quieren escuchar una historia divertida? Le hice una depilación con cera a una clienta que se preocupaba mucho y estaba asustada. Le quité la primera banda depilatoria y la peluca salió volando de su cabeza. Ella estaba muy avergonzada, pero para levantarle el ánimo, le quité la peluca y continué haciendo mi trabajo de esa manera. © CallMeCudi_ / Twitter
• Recuerdo que en la secundaria chateaba con un chico que me gustaba. En ese entonces se podía editar el nombre de las canciones en una red social. Le envié una canción de Beyoncé y le dije que era yo la que cantaba. © ariellelange / Reddit
• Estaba en un mercado al aire libre con mi bebé y alguien dijo: “¡Oh, qué lindo! Ese niño está besando su reflejo en las losetas”. Nop. Estaba chupando la fruta que habían botado al piso. © glynndah / Reddit
• Una vez en el gimnasio me tiré un gas muy fuerte (para que sepan la magnitud del asunto, en ese momento estaba escuchando canciones de Metallica con mis audífonos y aun así lo oí), me levanté del aparato en donde estaba haciendo ejercicio y nunca volví a regresar ahí. © Loqiemean / Twitter
• Una vez me subí llorando a un taxi. En el auto iba un chico extranjero de unos 25 años y con un acento muy gracioso me dijo: “No hay amor sin problemas”. Desde entonces considero que ese día se me apareció Pavel, “el apóstol de los gentiles”. © victoriannka / Twitter

Te recomendamos este artículo de personas que compartieron los momentos en que un niño dijo todo lo que no debía decir.

• Creí que estaba leyendo los comentarios bajo mi foto en Instagram, pero eran mensajes bajo las fotos de otras personas, y yo no me di cuenta de esto. Le escribí a alguien como respuesta: “Muchas gracias”, y esa ni siquiera era mi publicación. Me dio mucha vergüenza. © think_ethereal / Twitter
• Cuando estudiaba en la prepa, en el receso discutíamos arduamente sobre el tema: “Si en la Tierra quedarаn solamente una cucaracha y una mosca, ¿quién sobreviviría?”. Una compañera de clase de forma engreída dijo: “¿QUÉ LES PASA? ¿ACASO SON ANORMALES? SI NO HUBIERA PERSONAS, ENTONCES TAMPOCO HABRÍA OXÍGENO Y EN GENERAL TODOS MORIRÍAN”. © SAV__GAV / Twitter
• ¿A todos les ha pasado que cuando estás con tus papás viendo una película, de repente comienza una escena con la búsqueda de un trabajo, pero tú te das la vuelta y se vuelve algo incómodo para todos en la habitación? © saut333 / Twitter
• Entré un poco somnolienta a una papelería. Compré una regla, le entregué a la cajera un billete de 100, ella me volteó a ver y de forma seria me preguntó: “¿Tienes 18?”. Me avergoncé un poco, pero saqué mi identificación. La cajera se rio y me dijo: “18 USD”. © coldsemenova / Twitter
• Si te la pasas en casa 4 días y debido a eso te llaman hogareño, solo quiero recordarte que una vez no salí de mi departamento en 6 semanas y los vecinos llamaron a la policía porque pensaron que yo había MUERTO. © Wizard_Severus / Twitter
• Salí del metro y en la calle había un chico de unos 12 años con aspecto de indigente. Él sostenía un vaso, temblaba de frío y miraba a los transeúntes con hambre. Pensé: “Bien, le daré un poco de dinero”. Saqué un poco y se lo puse en el vaso, pero en lugar de agradecimiento, escuché: “¡Qué le pasa, ahí tenía mi café!”. Fue algo ofensivo y vergonzoso a la vez. © hustle_hazza / Twitter

Bono: no vale la pena tomarse las cosas muy a pecho

El tiempo pasa... y también las modas. Aquí puedes recordar las tendencias que usábamos antes y que hoy nos dan vergüenza.