Una tatuadora se rehusó a tatuar “propiedad de Víctor”, por considerarlo machista

Imagínate que te dedicas a tatuar a la gente y un día llega una persona que está a punto de cometer un gran error. ¿Qué harías? Seguramente sería incómodo decir “no” a un cliente, pero es que a veces hay peticiones que no se pueden cumplir, así como la tatuadora que se negó a inmortalizar una frase por considerarla un mensaje machista. La situación ha generado muchísimos comentarios en su red social.

Mora es una tatuadora colombiana muy famosa. Siempre está compartiendo en sus redes sociales todas las locuras que ha vivido como artista y las cosas divertidas que ha tenido que aguantar con algunos clientes. Sube videos en TikTok, y en uno de ellos habló sobre el porqué rechazó hacer un tatuaje que decía “propiedad de Víctor” para una de sus seguidoras.

La tatuadora Leidy Mora se enfrentó a una situación incómoda en Instagram. Una cliente le pidió una cotización para un tatuaje con la frase “propiedad de Víctor” y la fecha en que inició su relación, rodeado de flores y un “por siempre” al final. ¡Mora no podía creerlo! Pensó en la seguridad de su cliente y decidió que no podía realizar ese tipo de tatuajes que atentan contra la moral de la mujer. ¡Y qué bien hecho! La tatuadora se negó con sororidad, ética y la decisión de no ser parte de esas cosas. Con el tiempo, ha hecho tatuajes así de los que se ha arrepentido y como mujer sabe que no debe prestarse para hacer eso.

La controversia en torno a la decisión de Leidy Mora, ha generado opiniones encontradas entre los usuarios de las redes sociales. Por un lado, algunos han aplaudido la postura de la tatuadora y han destacado la importancia de respetar los valores y la moral de los artistas. Otros, por otro lado, han argumentado que los tatuadores deben estar dispuestos a tatuar cualquier diseño que el cliente desee, sin importar si ellos mismos están de acuerdo o no.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la decisión de un tatuador de negarse a realizar un diseño no siempre se trata de una cuestión de preferencia personal. En muchos casos, los tatuadores tienen la responsabilidad de cumplir con ciertos estándares éticos y profesionales en su trabajo. Esto puede incluir el rechazo de diseños que contengan lenguaje ofensivo o mensajes que atenten contra la moral y los valores de una sociedad justa y equitativa.

La postura de Mora en cuanto a la negativa de tatuar la frase, es digna de admirar. En una industria donde los tatuadores pueden sentirse presionados para aceptar cualquier diseño, ella se mantuvo firme en sus principios. En lugar de comprometer su ética, Mora decidió tomar una postura valiente y decir “no” a un diseño que iba en contra de sus valores.

Como artista y mujer, Mora sabe que no puede ser parte de un mensaje que trivializa la importancia de la igualdad de género y el respeto hacia las mujeres. Su postura fue expresada de una manera jovial, pero al mismo tiempo enfática, lo que demuestra su fortaleza en sus convicciones.