Historias

La aventura de tener un hijo es la mezcla exacta entre mucha felicidad y caos total. Hay veces en que los padres se ven superados por los llantos o caprichos de sus niños, y no hay nada que les venga mejor que una palabra de aliento o un poco de ayuda. Esto les sucedió a los protagonistas de este artículo, que se vieron salvados por la solidaridad de personas muy bondadosas.

Todos sabemos que un buen ambiente laboral es algo fundamental para sentirnos cómodos y felices realizando nuestras funciones. Otros factores, como la convivencia entre colegas, también hace que la jornada sea más sencilla y disfrutable, pero ¿qué pasa cuando nuestros compañeros de trabajo son demasiado bromistas y cruzan la línea?

En un mundo donde pareciera que el calor humano se ha perdido, hay gente que muestra que aún se conserva la empatía. Una persona que deja en su puerta bebidas y bocadillos para los repartidores o alguien cuyo vecino baja a limpiar su ventana luego de ensuciarla al realizar unos cambios en su casa son algunos ejemplos de ello.

Los niños tienen la virtud de ser dueños de una mirada dulce, imaginativa, risueña e ingenua ante el mundo que los rodea. Es por esta razón que los más pequeños son conocidos por decir lo que piensan sin medir el peso de sus palabras, ya que su inocencia se traduce en una sinceridad absoluta que es capaz de asombrarnos. Indudablemente podemos aprender mucho de los pequeños y, en varias ocasiones, sus interpretaciones de la vida sin filtro pueden ser sumamente cómicas.

Sabemos que cada oficio tiene un reglamento, lo cual resulta necesario para poner orden, pero los problemas comienzan cuando dichas reglas son absurdas. Trabajar en una cafetería donde hay que decir “sí” a todo lo que el cliente pida, o tener un jefe que cierra todos los baños excepto los que se ven desde su oficina para cronometrar el tiempo de uso demuestra que hay normas que sobrepasan el límite de la cordura.

Las amistades tienen un rol significativo en la vida de las personas y, para las celebridades, esto no es la excepción. Todos nos merecemos una hermandad en la que podemos confiar, especialmente en el mundo del espectáculo que está lleno de competencia. En Hollywood existen dúos dinámicos que van más allá de las pantallas y las alfombras rojas; desde compañerismos icónicos como el de Taylor Swift y Selena Gomez, a relaciones duraderas como la de Robert De Niro y Martin Scorsese.

En la mayoría de los casos, comprar cosas resulta una actividad satisfactoria, pero muchas veces nos podemos dejar llevar por el impulso y luego estar arrepentidos de haber gastado dinero en algo realmente inútil. Un cerdo rosado vibrante o gastar el doble por unos calcetines de diferente color, nos podría llevar a la conclusión de pensar dos veces antes de decidir adquirir algo.

No nos dejarán mentir, la vida está llena de momentos inesperados que hacen que nos replanteemos la existencia constantemente. En ocasiones parece que te sonríe y te va marcando el camino hacia la cima del éxito, y de repente, que siempre no, que te esperes un ratito más, que el efecto mariposa movió el eje de los planetas y ahora debes decirle adiós a eso que tanto querías. Jamás lo entiendes por completo, pero lo cierto es que siempre llegan cosas mejores.

Nuestros amigos de cuatro patas son muy inteligentes y, en ocasiones, sorprenden tanto que nos pueden hacer dudar de que sean solo animales. Ya sea repitiendo lo que decimos muy claramente o percatándose de que nos burlamos de ellos, a veces parece que son más astutos que nosotros.

Es común escuchar a padres desmerecer lo que dicen sus hijos. Pero también es verdad que hay quienes se dignaron a poner un poquito de atención y descubrieron que de sus bocas pueden salir frases con ideas muy geniales. No tenerle miedo a conversar con uno de estos seres, que todavía viven el mundo como una experiencia nueva, puede ser muy revelador.

Sentir un flechazo por otra persona no es algo de todos los días, pero cuando pasa, a veces nos surgen algunas preguntas. La diferencia de edad es una de las más estigmatizadas en cuanto al amor. Para nuestra suerte, tenemos un gran ejemplo que nos demuestra que, cuando sentimos mariposas en el estómago, no hay límites. A pesar de los 25 años de diferencia que hay entre Catherine Zeta-Jones y Michael Douglas, ellos se dejaron flechar por Cupido y se siguen eligiendo todos los días desde hace más de 20 años.

En un mundo tan altamente influenciado por lo que dictan los medios de comunicación, encajar en los estándares de belleza se ha convertido en preocupación de muchas personas. La inseguridad que nuestra apariencia nos genera al chocar con lo que el mundo del espectáculo considera “atractivo” afecta cómo nos vestimos, cómo actuamos e incluso restringe las decisiones que tomamos. No fue así para una carismática actriz española: Rossy de Palma. Abrazando su apariencia poco convencional, su personaje se ha convertido en un equivalente de estilo y glamur, y es fuente de inspiraciones para incontables directores y diseñadores.

Los niños se caracterizan por su honestidad y su espontaneidad. Ellos son capaces de dar vuelta cosas que para nosotros no son tan gratas y hacerlas agradables. Una niña que llama “estrellas” a las estrías porque parecen constelaciones, u otro que encuentra a su madre llorando y le dice “todo está bien, te amo mucho” son muestras de que su inocencia es maravillosa.

A lo largo de la vida, nos encontramos con muchos tipos de personas, desde aquellas que suelen hacer gala de su generosidad infinita hasta las que parecen haber heredado toda la mezquindad que no tuvieron las otras. Realmente, lo que sí es importante es la manera en que reaccionamos a nuestras experiencias con la gente egoísta y las enseñanzas que sacamos de ellas.

La vida generalmente transcurre entre nacer, crecer, encontrar un trabajo y ser feliz en él o vivir deseando nunca haberlo hallado. Y es que, en ocasiones, escuchamos por todos lados decir “esfuérzate por ser el mejor, por crecer en la empresa”, y esto simplemente no sucede porque todos los factores que existen en ese lugar hacen que queramos huir y no regresar jamás.

Hay un dicho que afirma que “todo lo que hacemos se nos regresa multiplicado”, y la vida nos muestra que muchas veces esto se cumple. Seguramente todos alguna vez nos hayamos topado con actitudes malas de otras personas o de nosotros mismos y hayamos visto cómo el búmeran de la vida les o nos devuelve eso.

Si hay algo que suele ocurrir durante la infancia, es que la capacidad para utilizar la imaginación es inmensa. Hay momentos en que los razonamientos de los niños suelen ser sorprendentes para nosotros, los adultos. Una excelente idea es atesorar esos instantes en que nuestros pequeños nos muestran su ocurrente ingenio. Sin duda, tendremos un sinfín de historias maravillosas para contar.

Cuando estamos enamoradas nos puede pasar que omitamos ciertas cosas para que no se nos rompa la ilusión (y el corazón). Sin embargo, cuando la intuición y la evidencia están al borde de la mano y delante de nuestros ojos, es momento de entrar en acción.

La mayoría de los niños viven en un mundo de fantasía que para muchos adultos es incomprensible. Cuando los pequeñitos tratan de explicar su realidad con sus propias palabras a los “mayores”, es muy difícil mantener una cara seria, ya que con sus ocurrencias se convierten, sin querer, en los comediantes del hogar.

Una joya puede tener un pasado muy interesante. Ya sea un brazalete que heredamos de nuestros antepasados, un anillo de compromiso que esperábamos hacía tiempo o una obra de arte hecha con nuestras propias manos, todas las piezas tienen un relato de cómo llegaron hasta nosotros. Y el valor sentimental que tienen estas reliquias es incomparable.