Historias

Si alguien menciona el nombre de Tom Cruise, inevitablemente uno suele pensar en películas de acción como Misión Imposible y otros grandes filmes que han logrado recaudar más de 8 mil millones de USD a nivel global, lo que lo convierte en una de las estrellas más taquilleras. Desde su brinco a la fama a los 18 años, el actor ha continuado lanzando éxitos que hacen difícil ignorar su presencia en Hollywood. Los posters en las paredes con su rostro nunca faltan. A sus 60 años, no solo se dedica a interpretar personajes frente a una cámara, sino también a ser productor de cine, sin dejar de lado su aprecio hacia los fans.

Los gatos son animales que, a simple vista, parecen ser muy tranquilos y dormilones. Sin embargo, dentro de ellos también se puede encontrar una criatura con personalidad fuerte y con ganas de jugar hasta que las garras se gasten. Las personas que tienen uno (o varios) podrían entrar en la categoría de “afortunados” por la oportunidad que tienen de compartir su vida con estos seres, pero rara vez nos ponemos a pensar en cómo se sienten ellos rodeados de tantos humanos.

Eugenio Derbez es hoy en día uno de los artistas mexicanos más reconocidos en el mundo del cine y la televisión. Con más de 40 años de trayectoria, una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood y un Óscar, este actor y comediante no tuvo un camino fácil. La paternidad llegó a su vida cuando era muy joven, lo cual tuvo que mezclar con sus planes de vida profesional.

Dicen que la familia es el mejor regalo que tenemos en la vida. Por lo general, son los hermanos, padres, tíos y demás seres con quienes compartimos sangre los que están en las buenas y malas con nosotros. Sin embargo, en ocasiones, los inconvenientes pueden ser causados por ellos. ¿Por qué son así?

Probablemente todos hemos tenido un oficio o profesión que no era de nuestro agrado. Con frecuencia, las deudas, las facturas y la vida misma nos pueden hacer sentir tan presionados por mantener nuestros ingresos que no tenemos otra opción más que seguir allí. Incluso si es difícil, quizás resulte mucho más beneficioso tener la fortaleza y la objetividad para reconocer lo que es mejor para nosotros, y actuar de acuerdo a ello.

Todos sabemos que los niños piensan y dicen las cosas más creativas y a veces sin sentido que uno pueda imaginar. Sin embargo, en ocasiones nos pueden sorprender con un relato lleno de detalles que nos eriza la piel y nos deja reflexionando por mucho tiempo después.

Hay personas que al llegar a la adultez anhelan convertirse en padres. Pero no todos tenemos los mismos planes o prioridades. Mientras que para algunos un hogar con niños jugando, llorando y riendo es una bendición, para otros, el silencio y los máximos decibeles de una película o de nuestra canción favorita son el paraíso.

Perder a un ser querido es una de las situaciones más dolorosas que una persona puede experimentar, y, aunque lo intentas, nunca logras comprender del todo por qué ese alguien ya no está, por qué ya no podrás abrazarlo nunca más. Y ahí te quedas, con mil preguntas atoradas en la garganta y haciendo de su recuerdo tu más grande motor. Cuando perdí a papá, algo dentro de mí se desmoronó. Hasta la fecha, no sé cómo lidiar con su ausencia.

Quienes tenemos animales, sabemos que son parte de la familia. Uno se alegra con ellos y disfruta de los buenos momentos, como también sufre cuando las cosas no van del todo bien. La historia de Doc, un perro abandonado en su última etapa de la vida, nos enseña que nada está perdido cuando hay amor para dar.

Podríamos imaginar a los padres como unos seres místicos que tienen el control del hogar, esperando solo un error para implantar los más severos castigos, pero en realidad los actos o palabras ingeniosas de los más pequeños del hogar podrían arrancar más de una sonrisa a los adultos.

Tener un buen jefe es una gran experiencia: el ambiente de trabajo es sano y las metas se cumplen con mucha energía. Tener un mal jefe, bueno, no es lo mejor del mundo. Y de esto saben muy bien aquellos que se han encontrado con superiores que no respetan el horario y las vacaciones. O bien, los que gritan sin razón. Definitivamente, alguien los tiene que poner en su lugar.

Cuando emprendemos un viaje, sea por ocasiones especiales o por un transporte diario, jamás nos imaginamos que algo extraño pudiera a suceder. Sin embargo, en la vida no todo pasa como esperamos, y nos cruzamos con personas que terminan convirtiendo nuestra jornada corriente en una disparatada, que podremos contar a través de los años.

La imaginación de los niños no tiene límite. Incluso por momentos, puede ser tan creativa que asustan a sus padres con lo que inventan, creando la duda de si lo que dijeron podría ser real o no. ¿Te ha pasado con tu pequeños?

En el mundo de la música existen varias canciones que son sencillas de entender en una sola pasada, así que no resulta extraño que también haya letras que van más allá del título y son abiertas a interpretación. Probablemente has bailado y cantado a la par de temas como “Somebody That I Used to Know” de Gotye o “Hey Jude” de The Beatles, pero, ¿conoces su verdadero significado?.

Abordo de un taxi se pueden desarrollar tanto dramas como sucesos cargados de humor. Los pasajeros o conductores son quienes tienen la suerte de llevarse a casa una de estas dos clases de anécdotas gratis. Algunos de ellos, quisieron compartir las experiencias que los hicieron reír durante o después de su trayecto con más personas, y nosotros no pudimos más que parar bien la oreja y abrir más los ojos.

Los niños tienen una imaginación infinita. Para ellos, inventar o armar historias es pan comido, pero en ocasiones sus relatos terminan siendo escalofriantes, nada les piden a los guiones de películas de terror.

Hay personalidades extrovertidas e introvertidas, sin embargo, todas confluyen en un mismo lugar: los medios de transporte. Es aquí donde las personas comparten ciertos períodos de tiempo y donde, de manera inevitable, uno puede cruzarse con viajeros que parecen de otra especie que no fallan en grabarse en la memoria.

No hay forma de saber con quién nos toparemos cuando nos dirigimos a nuestros destinos. Puede que, al subir al bus, nos crucemos con alguien súper bondadoso que nos cuente la historia de sus primos, o con quien tenga el peor de los humores. Y en el caso de la segunda, no queda más remedio que amarrarse con mas fuerza el cinturón y rogar porque el chofer le pise al acelerador.

Si vivimos en ciudades, es muy probable que tomemos buses y trenes con frecuencia (y aviones, si tenemos suerte). En un mundo ideal, estos viajes son relajantes y transcurren sin inconvenientes. Pero como nos hallamos en la realidad, las cosas tienden a salirse de nuestro control y estos entretenidos recorridos se llenan de gente extraña y situaciones que nos hacen decir “trágame tierra”.

Los niños son niños, y mientras aprenden, puede ser que haya situaciones en donde hagan cosas que a ellos les parezcan una genialidad. En el ámbito de la escuela, parece que los profesores no supieron interpretar las ideas de los pequeños, y citaron a sus padres para hablar de sus “ocurrencias”.